El acusado de acuchillar a otro joven en el parque de Mesones de Santander asegura que "nunca" ha utilizado un arma
La Fiscalía pide para este procesado seis años de prisión por un delito de homicidio en tentativa
Complejo judicial de las Salesas. Santander - EUROPA PRESS - Archivo
Santander
El acusado de acuchillar a otro joven en el parque de Mesones de Santander durante la fiesta de la hoguera de San Juan de 2023 ha asegurado que "nunca" ha utilizado ni llevado encima un arma y que "jamás apuñalaría a otra persona".
"Eso lo sabe él, lo sabe su abogado, todos saben que yo no he sido", ha señalado el acusado durante su declaración en el juicio que se ha celebrado en la Audiencia de Cantabria.
La Fiscalía pide para este procesado seis años de prisión por un delito de homicidio en tentativa.
En su declaración, ha reconocido que conocía a la otra persona de otra pelea que tuvieron hace un tiempo y que esa noche, la de San Juan, "conectaron miradas" en la distancia.
Según su versión, fue el agredido quien se acercó, le dio un golpe en el hombro y comenzó a pegarle puñetazos, a lo que él respondió con otro.
Ha asegurado que, después de darle un solo puñetazo, él estaba quieto porque sabía lo que el agredido quería porque "siempre le estaba buscando".
Y ha señalado que fue horas después de los hechos cuando, a través de una llamada de teléfono, se enteró de que el agredido había sido apuñalado, algo que, según ha añadido, no sabe cómo pudo producirse.
Según el informe de los peritos, la víctima de este suceso presentaba hasta cuatro puñaladas en un costado, en el abdomen y, la más importante, en el muslo derecho.
Los hechos constituyen para la Fiscalía un delito de tentativa de homicidio, por el que solicita una pena de seis años de prisión y 10.330 euros de indemnización por las lesiones y las secuelas.
El Ministerio Público ha planteado la alternativa de delito de lesiones con instrumento peligroso, con tres años y seis meses de prisión, en caso de que la Sala no considere que es homicidio.
La acusación particular, por su parte, pide siete años de prisión, nueve años de alejamiento y prohibición de comunicarse con la víctima, además de una indemnización de 19.123 euros
