Pasaje Seguro considera "insuficientes" las explicaciones del Gobierno de Cantabria sobre los 18 menores migrantes

SANTANDER

El colectivo Pasaje Seguro ha considerado "absolutamente insuficientes y contradictorias" las explicaciones que ha recibido en la reunión que ha mantenido con el subdirector de Infancia, Adolescencia y Familia del Gobierno de Cantabria, Jaime Serdio, respecto a los 18 menores migrantes sobre los que el Ejecutivo ha pedido a la Delegación del Gobierno que recopile información de las circunstancias familiares de cada uno.

En un comunicado, el colectivo ha opinado que "no se sostiene la manifestación de pretender la mejor defensa de los intereses de los menores con la iniciación de expedientes de expulsión basados en el presunto mejor cuidado que estos niños recibirían si fueran devueltos a sus países de origen" porque "estos niños migran en condiciones dificilísimas por la situación de sus países de origen, y por la negativa de la Unión Europea y España a abrir rutas seguras para la migración".

Además, ha apuntado que "se sostiene menos" teniendo en cuenta los países de procedencia de los niños: Gambia, Mali, República de Guinea, Costa de Marfil, Argelia, Túnez, Marruecos y Moldavia.

Para Pasaje Seguro, "la puesta en marcha de esta vergonzosa operación no tiene otro objetivo que generar miedo y desconfianza sobre las personas migrantes, especialmente sobre los niños y niñas migrantes que están bajo la custodia de las administraciones públicas".

Además, ha acusado al PP de que se está "subrogando" a esta operación que "emprendió Vox hace años".

Con todo, Pasaje Seguro "quiere quedarse" con la afirmación de la consejera de Inclusión Social, Begoña Gómez del Río, de que "cumplirán la norma de acogida aprobada en el Congreso de los Diputados", afirmación que se ha reiterado en la reunión con la Subdirección de Infancia.

En consecuencia, ha hecho un llamamiento al PP "a implementar la acogida de la mejor manera posible, lo que implica celebrar la acogida y bienestar de estos menores de la misma manera, al menos, que lo hemos hecho con las personas ucranianas refugiadas de la invasión rusa, unas 1.500 personas en Cantabria".

También, en consecuencia, le ha instado a "retirar los expedientes de expulsión presentados" y "a cambiar su discurso público criminalizador de los niños y niñas migrantes, a actuar conforme al humanismo cristianismo del que dicen sentirse parte y que contradicen con las políticas que practican".