Cantabria vive un buen momento para las reformas de las viviendas
La cantidad de viviendas de segundo uso y la antigüedad de las edificaciones cántabras son las dos principales razones para que Cantabria tenga un crecimiento en las reformas de las viviendas

Cantabria vive un buen momento para las reformas de las viviendas
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Cantabria
La Asociación que representa a la distribución profesional de materiales para la edificación y rehabilitación (Andimac) prevé que este año se realizarán reformas en Cantabria en algo más de 26.600 viviendas, un 4,4% más que el año anterior, por encima de la media nacional (1,6%) tal y como se desprende del Observatorio 360 que la consultora Arthursen elabora para la patronal cada año.
Un crecimiento mayor del esperado que, porcentualmente, mejora el incremento interanual del curso anterior en toda España -el aumento en 2024 respecto a 2023 fue del 1%- y que "trae esperanzas de consolidar una necesaria cultura de la rehabilitación en Cantabria", especialmente por el impulso registrado en los últimos meses del ejercicio pasado, ha señalado la asociación en un comunicado.
Así, el valor de mercado estimado a partir del volumen de actividad en esta región asciende a 5.951 millones de euros, un 3,4% más que en 2024, mientras que el gasto medio por hogar en materiales para reformas también anotará un incremento, pasando de 1.289 a 1.368 euros en 2025, un desembolso por encima de la media nacional (1.247 euros).
Un repunte que está directamente relacionado con el precio de las materias primas, una tendencia al alza desde los primeros compases de la pandemia que ha venido moderándose en el último año y que podría estar sujeta a cambios en función de la oscilación de costes de dichos materiales.
Andimac atribuye la mejoría de las previsiones tanto al crecimiento en la compraventa de segunda mano en España como al envejecimiento constante del parque inmobiliario, del que el 80% de los edificios y viviendas reciben una calificación energética E, F o G, es decir, insuficiente.
En este sentido, durante este año cerca de 535.000 viviendas pasarán a tener más de 18 años y son candidatas a la renovación. Las nuevas exigencias en cuanto la eficiencia energética, necesarias para la venta o alquiler, favorecen las reformas orientadas al aislamiento y a la instalación de sistemas más eficientes y sostenibles.
El reverso que frena la tendencia positiva se localiza principalmente en la falta de mano de obra, lo que condicionará el comportamiento del sector e impide garantizar un crecimiento más sólido.
Escaso aprovechamiento de los fondos europeos
En cuanto a los visados para la rehabilitación, el incremento que se producirá es notorio: Andimac estima un aumento del 7,5% este año con relación a 2024. Aquí se espera una mayor recuperación precisamente porque ya durante 2024 se ha visto un desarrollo de este segmento.
Sin embargo, en el capítulo de la rehabilitación de edificios se evidencia un escaso aprovechamiento del efecto tractor de los fondos europeos. En términos absolutos, los fondos no han servido para impulsar este mercado, según Andimac.
En 2019 se rehabilitaron apenas 29.000 viviendas y en 2024 no se alcanzarán las 25.000. Estas cifras contrastan con la evolución de las deducciones por obras de rehabilitación energética en las viviendas, que ya en 2023 superaron las 110.000 viviendas.
En este sentido, Andimac estima que las deducciones por rehabilitar beneficiarían a 200.000 hogares. Y recuerda que en 2021, cuando se impulsaron las primeras deducciones fiscales en materia de eficiencia energética, se presentaron un total de 2.535 declaraciones. En 2026 estas líneas de deducción podrían desaparecer ya que están ligadas a la financiación europea de los NGEU




