El SCS tarda dos meses en comunicar los resultados de las mamografías pese a decir en los folletos del Programa de Detección que lo hará en 15 días

Santander

El Servicio Cántabro de Salud (SCS) está tardando de media dos meses en comunicar los resultados de las mamografías realizadas dentro del Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama, a pesar de que los folletos informativos entregados a las participantes prometen que recibirán una carta con el resultado en menos de 15 días.

El consejero de Salud, César Pascual, ha admitido públicamente que el sistema está sufriendo retrasos y que, como medida paliativa, se ha optado por externalizar parcialmente la lectura de las pruebas.

Una de las afectadas es Mariu Ruiz, una mujer de 53 años que ha denunciado en Hora 14 Cantabria la falta de información y el incumplimiento de los plazos. Ruiz se sometió a una mamografía el pasado 5 de agosto, pero no fue hasta el 15 de octubre cuando recibió una carta del servicio de radiología del Hospital Valdecilla informándole de que debía realizarse una prueba complementaria para completar el estudio.

“No han sido dos semanas. Esta vez han tardado más de dos meses”, lamenta Ruiz, quien ya había participado en el programa en 2023 y asegura que entonces sí se cumplieron los plazos. “Me notificaron verbalmente que si había algún problema me llamarían en cuestión de días, y si todo estaba bien, recibiría una carta en un máximo de dos semanas. Y así fue”.

Ruiz conserva el folleto informativo que el SCS entrega a las mujeres que participan en la actual campaña (2024–2026), donde se indica textualmente: “En la mayoría de los casos, las mamografías son normales y en menos de 2 semanas recibirá en su domicilio una carta comunicándole el resultado”. Sin embargo, esta vez no ha sido así: “Nada que ver con lo anterior. Estoy en ese limbo de las 60 o 70 mujeres que necesitan una prueba complementaria y que esperan sin saber”.

Falta de información

La afectada ha intentado obtener información llamando al servicio correspondiente, pero se ha encontrado con barreras administrativas. “No podían acceder a mi historia clínica por protocolo. Me dijeron que tenía que presentar una solicitud por atención al paciente o por sede electrónica”.

Ruiz subraya que su crítica no va dirigida a los profesionales sanitarios, a quienes califica de “magníficos, sino al desmantelamiento progresivo de la sanidad pública. No me planteo acudir a la privada porque me da mucha rabia. Todos pagamos impuestos para que lo público funcione, no para que se derive presupuesto a entidades privadas”.

La prueba complementaria está programada para el próximo 12 de noviembre, más de tres meses después de la mamografía inicial. “Como mujer, como persona que se enfrenta a una duda y a una desinformación, me siento mal. Es una niebla continua que no te deja dormir con tranquilidad”, concluye.