Modesto Chato: "Mi vida es UNATE"

Santander

El próximo 15 de noviembre, Modesto Chato será nombrado Hijo Adoptivo de Cantabria, un reconocimiento a casi 50 años de dedicación a la formación de las personas mayores a través de UNATE, la Universidad Nacional Aulas de la Tercera Edad, que él mismo fundó en 1978 con apenas 150 personas y que hoy supera los 2.700 alumnos.

Una idea pionera en España

Cuando Chato impulsó UNATE, la formación para mayores de 50 años era una rareza. “Era tan inhabitual que el ministro de Universidades nos prohibió usar el nombre de Universidad de Mayores”, recuerda. La solución fue ingeniosa: “Dijimos, si en una universidad hay aulas, pues llamémonos Universidad Aulas de la Tercera Edad”.

Desde entonces, UNATE ha crecido hasta convertirse en una referencia nacional e internacional. “Fuimos admitidos en organizaciones internacionales cuando aún no tenía edad para estar en sus consejos. Me metieron en el consejo científico y así entramos”, recuerda.

Mi vida es UNATE

Para Modesto Chato, UNATE no es solo un proyecto profesional, sino su razón de ser. “Yo ya he desaparecido. Mi vida es UNATE. Sueño con UNATE, me levanto con UNATE y me acuesto con UNATE”, afirma con emoción. “Sé que es una vida que por lo menos ha servido para alguien”.

El impacto de su labor se refleja en los testimonios de quienes han pasado por la institución. “Ayer mismo me decían: ‘Gracias a UNATE soy feliz’. Eso para mí es mucha más felicidad todavía”.

La formación no tiene edad

UNATE ofrece una amplia variedad de actividades culturales, educativas y sociales en toda Cantabria. “No hacemos cosas arbitrarias. Son actividades pensadas, reflexionadas y con objetivos concretos”, explica Chato. Desde sus inicios en Santander, la institución se ha expandido a otras localidades como Torrelavega o Cabezón de la Sal.

Su filosofía es clara: “Las personas mayores saben muy bien lo que quieren y cómo lo quieren. No tenemos derecho a imponerles normas. Hay que dejarles en libertad”.

Aunque reconoce que el crecimiento no será tan rápido como en el pasado, Chato tiene claro el camino: “Queremos seguir avanzando, modernizando nuestros sistemas y defendiendo que las personas mayores sean respetadas, no solo por ser mayores, sino por ser personas”.

UNATE ha creado incluso sus propios títulos honoríficos, como el “Magister Senior” o el “Doctor Honoris Senior”, para reconocer a quienes siguen aportando a la sociedad tras su jubilación.

Hijo Adoptivo de Cantabria

El nombramiento como Hijo Adoptivo de Cantabria es, para Chato, un honor inmenso. “Es una generosidad del Gobierno de Cantabria y de la Universidad. Aunque no nací aquí, me siento de aquí desde los tres años y medio”.

Con casi medio siglo de historia, UNATE sigue siendo un ejemplo de cómo la educación puede transformar vidas a cualquier edad. Y Modesto Chato, su alma mater, continúa al pie del cañón.