El retraso en la entrada de la facturación con Verifactu hasta 2027 es "necesario" para las empresas cántabras

Santander

El Gobierno de España ha decidido retrasar la implantación de Verifactu, el sistema que garantizará que todas las facturas emitidas por empresas y autónomos sean trazables y comunicadas de forma segura a la Agencia Tributaria.

Tras las quejas de patronales y asociaciones de autónomos, el Consejo de Ministros aprobará un decreto ley que amplía los plazos: las empresas que tributan por el Impuesto de Sociedades tendrán hasta el 1 de enero de 2027, mientras que los autónomos dispondrán de margen hasta el 1 de julio de ese mismo año.

Adrián Nieto, responsable de la Oficina Acelera Pyme de la Cámara de Comercio de Cantabria ha valorado en la Cadena SER esta decisión como “necesaria”.

Empresas cántabras

Para Nieto la mayoría de las 38.000 empresas y autónomos cántabros no estaban preparados para cumplir con la normativa en el plazo inicial. “Existía miedo, dudas y falta de recursos. De haberse mantenido la fecha, habría sido una avalancha de solicitudes y consultas”, explica.

Nieto subraya que, aunque muchas compañías han aprovechado el impulso del Kit Digital y las ayudas regionales para avanzar en su transformación tecnológica, la implantación de Verifactu supone un reto adicional, especialmente para pequeños comercios y autónomos que aún trabajan sin sistemas digitalizados.

“Para ellos, el primer paso es básico: incorporar un ordenador o un TPV y empezar a emitir facturas electrónicas. A partir de ahí, vendrán otros desafíos como la ciberseguridad o la automatización”, señala.

Ayudas desde la Cámara de Comercio

Desde la Cámara de Comercio se están reforzando las jornadas informativas y el asesoramiento personalizado para reducir la incertidumbre y acompañar a las empresas en este proceso.

Nieto insistió en que la prórroga no debe interpretarse como una excusa para retrasar la adaptación: “La digitalización ya no es una opción. Cumplir con la ley es importante, pero también lo es optimizar procesos y ganar competitividad”.

El responsable de Acelera Pyme considera que este cambio normativo puede convertirse en una oportunidad para modernizar el tejido empresarial cántabro: “Digitalizarse no solo significa cumplir con la ley, significa mejorar tiempos, reducir costes y ser más eficientes”.