Sigue la búsqueda de Roberto García en Casarrubios del Monte
Desaparecido en febrero de 2019, se han realizado nuevas batidas en pozos, balsas y caminos con distintas unidades especializadas
Toledo
La Guardia Civil no cesa en la búsqueda de Roberto García Solana, vecino de la localidad de Casarrubios de Monte desaparecido el 18 de febrero de 2019. Desde entonces, el cuerpo de la Benemérita no ha parado de buscarlo. Los agentes del Área de Personas de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial (UOPJ) de la Guardia Civil de Toledo encargados de la investigación continúan trabajando desde hace más de tres años con el fin encontrar a Roberto y esclarecer los motivos de su desaparición.
Junto a distintas unidades especializadas de la Guardia Civil como el Servicio Cinológico, con canes especializados en búsqueda de personas, y el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), han rastreado distintos puntos en la zona próxima a donde se le vio por última vez. También se ha contado con la colaboración de Protección Civil. Se han realizado nuevas batidas en pozos, balsas y caminos entre las poblaciones de Casarrubios y El Viso de San Juan, examinando las proximidades del río Guadarrama a su paso por la provincia de Toledo. Roberto García Solana tenía 63 años en el momento de su desaparición, mide 1,70 metros de altura, con complexión normal y pelo canoso.
Ante la de varias pruebas, la Guardia Civil detuvo a un sospecho. El móvil económico es una de las hipótesis que cobró más fuerza entre los investigadores. Los investigadores en el caso creen que a Roberto le asaltaron y le golpearon para que confesara las claves que dan acceso a su tarjeta bancaria. Y una vez comprobaron que el código era bueno, lo habrían asesinado y hecho desaparecer el cadáver.
Pocos días después de que se perdiera su rastro, hasta en cuatro ocasiones alguien extrajo dinero de su cuenta. Finalmente, los agentes demostraron que quien acudía al cajero era su vecino, que fue detenido como sospechoso y enviado a prisión provisional durante cuatro meses, aunque su implicación en el crimen no ha podido ser demostrada puesto que mantiene la versión de que se encontró en la calle la tarjeta de crédito de Roberto y las claves apuntadas en un papel.
Roberto García Solana tenía 63 años en el momento de su desaparición, mide 1,70 metros de altura, con complexión normal y pelo canoso. Si tienes alguna información de su paradero, contacta con la Guardia Civil a través del teléfono 062 o de forma totalmente anónima a través de la aplicación móvil gratuita ALERTCOPS.