Diputación de Cuenca y Obispado invertirán 700.000 euros en rehabilitar doce iglesias parroquiales de la provincia
Entre ellas las de Horcajo de Santiago, con 100.000 € de presupuesto, y Caracenilla, con 120.000 €, en la comarca de Tarancón
Tarancón
La Diputación de Cuenca y el Obispado de Cuenca han renovado su colaboración para mantener y rehabilitar el patrimonio religioso de la provincia por medio de un convenio que asciende a 700.000 euros y que es aportado al cincuenta por ciento por cada entidad. Este año se va a actuar en las iglesias parroquiales de Horcajo de Santiago y Caracenilla, en la zona de influencia de Tarancón, además de en Alconchel de la Estrella, Fuentes, Fuentes Claras, Jábaga, Santa María de los Llanos, Tinajas, Valdemoro del Rey, Villanueva de los Escuderos, Villar del Humo y Zarzuela.
El convenio ha sido suscrito por parte del presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, y el obispo de la Diócesis de Cuenca, José María Yanguas, que han estado acompañados por la vicepresidenta de la institución provincial, Nuria Illana, así como por el arquitecto del Obispado, Esteban Salarategui.
El presidente provincial ha declarado que los edificios religiosos son en muchos municipios "el principal atractivo patrimonial que tienen y es un vestigio del pasado de Cuenca y de sus pueblos". En este punto, es indudable que los templos “cuentan la historia” de los vecinos y vecinas que durante generaciones han tenido en las iglesias parroquiales el epicentro de la vida social del municipio.
Desde la Diputación se continúa con esta colaboración que da muy buenos resultados a la provincia de Cuenca y es muy importante porque “contamos con un rico y variado patrimonio eclesiástico”, según ha apostillado Martínez Chana.
Monseñor Yanguas ha destacado la importancia de esta colaboración entre ambas instituciones no sólo por su importe económico sino porque permite recuperar y mantener nuestro rico patrimonio artístico y cultural, a la vez que ayuda a conservar edificios muy queridos por los vecinos de las distintas localidades, que mantienen en ellos parte de sus raíces.