FACUA CLM: "En un festival, no te pueden obligar a comprar una pulsera: debes poder pagar con tarjeta o efectivo"

Este es el verano del 2022 es el verano de los festivales. Después de dos años de parón por la pandemia y sus restricciones, han vuelto con fuerza y no hay pueblo o ciudad que no organice el suyo. Este boom está generando algunos problemas en la organización y abusos en el funcionamiento que los consumidores pueden reclamar.

FACUA viene denunciando a numerosas organizadoras de conciertos y festivales ante diferentes irregularidades por las que reclama a las administraciones competentes que apliquen sanciones proporcionales a su gravedad que tengan carácter disuasorio. Y es que, las malas prácticas de ciertas empresas les suponen beneficios muy superiores a las multas que, en contados casos, acaban aplicándoseles.

La asociación ha identificado ya diez tipos de problemas e irregularidades que están dándose en la organización de estos. El presidente de FACUA Castilla-La Mancha, Francisco Ferrer, ha señalado en 'Hoy por Hoy Castilla-La Mancha' los más frecuentes.

1. No permitir la entrada con comida ni bebida

2. Cambios de ubicación sin derecho a reembolso

3. Artistas que suspenden actuaciones sin que se compense a los afectados

4. Cancelaciones por una mala gestión

5. Limitar el plazo para devolver el dinero

6. No permitir pagos en efectivo

7. Cobrar por recuperar el dinero de las pulseras cashless

8. Saturación en las colas

9. Finalización a mitad del evento

10. Exceso de aforo

¿Qué debemos hacer? Ejemplos prácticos

El más extendido es el de no permitir la entrada con comida ni bebida de fuera. Ante este problema, Ferrer indica que lo que tenemos que hacer si nos encontramos con la negativa de pasar comida o bebida es "guardar los tickets de lo que te gastes dentro... y, además de la reclamación en sí, también deberás reclamar la cantidad que te has gastado".

Hay festivales que no permiten pagos en efectivo o limitan el plazo para devolver el dinero si son cancelados por la mala gestión. De nuevo, irregularidad. "No nos pueden obligar a comprar ninguna pulsera para consumir", asegura Ferrer, y debemos tener el derecho de pagar con tarjeta o efectivo, sin tener negativa ante ninguna de las formas. Además, entre las denuncias más habituales está la del cobro por recuperar el dinero para bebida o comida que no hemos gastado de las pulseras.

Los cambios de ubicación sin derecho de reembolso o el caso de artistas que se caen del cartel sin derecho de compensación también están en el decálogo de mala praxis. Las multas que a veces se aplican, dice, son ridículas en comparación con el beneficio que supone para los organizadores.

Irregularidades que, tristemente, a veces dejan de ser 'pillería' de los organizadores con afán recaudatorio y son auténticas locuras. Es el caso de superar en exceso el aforo permitido, que alguna vez se ha llegado a cobrar la vida de los asistentes o herirles por aplastamiento.