Fernando Herranz anima a disfrutar San Mateo de Cuenca como unas “Maneras de vivir”
El pregonero invita a disfrutar las fiestas con moderación y respeto, haciendo corear en varias ocasiones a las peñas la conocida canción de Leño
Fernando Herranz durante el pregón de San Mateo 2022 en Cuenca
Cuenca
Cuenca ya está viviendo su San Mateo 2022, el más esperado después de 1.092 días sin poder disfrutar de las fiestas de la vaquilla, y que ha comenzado con el pregón del secretario general de la Comisaría de Policía Nacional de Cuenca, Fernando Herranz, que se ha autodefinido como “pregonero, madero… y rockero” mientras hacía corear a la concurrencia de la Plaza Mayor la canción “Maneras de Vivir”, de Leño.
En un pregón ágil, de menos de once minutos de duración, Herranz ha subrayado en varias ocasiones la necesidad de vivir las fiestas con moderación, con precaución sobre todo frente a la vaca, y sobre todo “disfrutar, reír, sentir, que es nuestra forma de ser, nuestras MANERAS DE VIVIR”.
Con un recuerdo especial a “todos los que se han marchado” durante estos años, “porque todos echaremos de menos a alguien corriendo la vaca, en las meriendas…”, Herranz ha pedido también a los corredores “que se aburran los doctores y los enfermeros” y que extremen la prudencia.
Ha lanzado asimismo los peñistas, a los jóvenes un mensaje pidiendo respeto hacia las mujeres, “que cuidéis a las chicas, sin temores, y no permitáis que nadie vulnere su integridad”, y que “disfrutéis mucho, todos, todas y todes”.
Julito y el cohete, otros de los grandes protagonistas de las fiestas mateas en Cuenca / Cadena SER
Durante el acto del pregón se han entregado también reconocimientos al personal de cuadras, al mejor corredor de 2019, Carlos Peñuelas, o a la Banda de Música de Cuenca, dirigida por Juan Carlos Aguilar, y cuyos pasodobles amenizan los ratos previos a la suelta de vaquillas.
Los maromeros, minutos antes de acudir a su cita con las primeras vaquillas / Cadena SER
Este año el desfile de peñas se ha desarrollado por la mañana, lo que ha restado público a la hora del pregón en la Plaza Mayor, aunque ha permitido que el acto comenzase con una puntualidad inusual.