Las conductas suicidas no han frenado después de la pandemia, tampoco en La Mancha

Alcázar de San Juan

Un 15% de los españoles reconoce haber pensado alguna vez en el suicidio. Casi el 20% de los jóvenes deseó su muerte el pasado año. Las ideas suicidas en niños se multiplican por 20 en la última década. Son titulares que realmente impactan y sobre todo dan la voz de alarma ante una realidad que se lleva 11 vidas al día en nuestro país. Diferentes asociaciones, repartidas por España, se encargan de ayudar a las personas que experimentan conductas autolíticas. Una de ellas es la Fundación Ceres, que desde su sede en Tomelloso apoya a toda la comarca de La Mancha. Cuentan que, pese a que cada vez existe mayor visibilidad sobre el suicidio, su teléfono no deja de sonar.

Las asociaciones de lucha contra el suicidio en la provincia lamentan que las intervenciones por conductas autolíticas lejos de bajar después de la pandemia, aumentan casi cada semana. Lo notan desde esta fundación, que reclaman la visibilidad como un factor importante de ayuda. Han lanzado desde la asociación tomellosera un proyecto para tratar en grupo los casos individuales de conductas suicidas. "40 segundos" se llama este proyecto que ya ha dado muy buenos resultados en Campo de Criptana y que ahora esperan expandir a Ciudad Real y a otros puntos de la provincia.

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