Día mundial del ictus en Castilla-La Mancha

Albacete

Mañana día 29 de octubre se celebra en todos los países el Día Mundial del Ictus. Esta efeméride tiene el objetivo fundamental de concienciar a la población sobre la importancia de la enfermedad y la necesidad de reaccionar a tiempo cuando una persona de nuestro entorno desarrolle sintomatología compatible con un ictus. La enfermedad que hace apenas 20 años no tenía tratamiento efectivo es ahora una emergencia médica que conviene diagnosticar lo antes posible. ¿Por qué? Porque en la mayoría de las ocasiones el problema estará ocasionado por un trombo que ocluye una arteria cerebral, y la Medicina ha desarrollado métodos químicos que permiten disolver el trombo y dispositivos biotecnológicos que facilitan extraerlo de las arterias afectadas. Pero ambas cosas sólo resultan efectivas si se hacen rápido.

El ictus es la segunda causa mundial de mortalidad, y en nuestra Región además la enfermedad que causa mayor mortalidad entre las mujeres. Hace pocas fechas los neurólogos, urgenciólogos, radiólogos, y médicos de emergencias más dedicados a esta patología en nuestra región nos reunimos en Albacete para intentar identificar áreas de mejora. La reunión fue muy interesante y permitió extraer algunas conclusiones relevantes; la primera de todas, que el sistema de emergencias médicas -lo que la gente conoce como el 112- funciona muy bien en nuestra región, y es capaz de identificar y trasladar a cualquier paciente con ictus que solicita ayuda mediante llamada a este número a un hospital capacitado para realizar el diagnóstico de manera temprana. También, que el número de tratamientos mediante “disolventes químicos” es muy alto, por encima de la media nacional. Pero se identificaron también importantes áreas deficitarias: por ejemplo, la dificultad para tratar a los pacientes castellano-manchegos cuando su problema no se puede arreglar con la infusión intravenosa de un fármaco, sino que requiere la intervención de neurólogos o radiólogos capaces de navegar por las arterias y mediante dispositivos específicos extraer el trombo, es decir cuando lo que se necesita es una trombectomía mecánica. En el momento actual estas técnicas solo se realizan en los hospitales universitarios de Albacete y Toledo, y hay dificultades para los traslados secundarios, es decir, de hospital a hospital. Dicho de otro modo, cuando el paciente es recogido en la calle o en su domicilio con sospecha de ictus el traslado a su hospital más cercano es muy rápido; pero sí una vez hechas las pruebas oportunas se identificara la necesidad de una trombectomía, el traslado a Toledo o Albacete ya no es tan ágil y la realización de estas pruebas dentro del primer centro consume mucho tiempo, dejando fuera a muchos pacientes que en otro caso podrían haber sido recanalizados.

Es por ello que todos los profesionales presentes solicitamos al SESCAM la elaboración de una nueva Estrategia de Reperfusión en el Ictus en CLM (la vigente data del año 2017) y la creación de la figura de un coordinador regional de ictus que pueda monitorizar la situación de la atención en cada momento y facilitar la toma de decisiones para cambiar los cuellos de botella de la ruta asistencial. En lo que se refiere al ictus las cosas en Castilla-La Mancha hasta la fecha se han hecho razonablemente bien, pero no podemos quedarnos atrás. Lo exigen nuestros ciudadanos, ya que miles de ellos son castigados cada año en la región con esta terrible enfermedad. Los neurólogos no podremos estar satisfechos hasta que no resolvamos el problema de la trombectomía mecánica ya mencionado anteriormente, y también el de la rehabilitación posterior al ictus para aquellos pacientes que la necesiten. El esfuerzo de las autoridades y de los profesionales en esta enfermedad siempre será muy agradecido porque, a diferencia de otras que quizá están más en boca de los políticos y los medios de comunicación, el ictus hoy por hoy sigue siendo la patología más letal y sobre todo la que causa mayor discapacidad en nuestra región. Por eso es tan conveniente que, al menos una vez al año, la población se haga consciente del problema, de los recursos puestos a su disposición para combatirlo, y también de las carencias que solo con su ayuda podremos acabar por superar.

Buen fin de semana.