El agua caída en Ciudad Real garantiza el abastecimiento para dos años

Ciudad Real

Tras las inundaciones que dejó ayer en Ciudad Real el paso de la borrasca Efraín poco a poco se va recuperando la normalidad en las zonas que resultaron más afectadas del oeste de la provincia

La CM-4017, en Horcajo de los Montes, ya se encuentra limpia y abierta al tráfico. La pedanía de Santa Quiteria, de Alcoba, se encuentra también con los caminos abiertos. Ayer los 71 vecinos quedaban incomunicados por la crecida de los arroyos de los Pescados, Aguaperosa y Alcobilla que inundó las vías de acceso al anejo. Ha sido la prioridad de actuación, según el alcalde Pedro Escudero.

Se calcula que pudieron caer unos 90 litros en esta población que ha sufrido a causa del temporal microcortes de luz y teléfono. En unos días comenzarán a valorar los daños que, temen, pueden ser cuantiosos.

En Retuerta del Bullaque, hay todavía algunos caminos cortados y se trabaja para abrir la CR-7121, otra de las carreteras que resultaron afectadas.

Precipitaciones que son bienvenidas en el campo, muy afectado por la sequía en las últimas campañas. Lo ha destacado en la SER el secretario provincial de ASAJA, Florencio Rodríguez que reconoce que van a venir muy bien a los cultivos leñosos, si bien va a retrasar la campaña de la aceituna porque no se podrá acceder a algunas explotaciones por la cantidad de agua caída.

Lluvias abundantes que celebra vendrán a recargar los acuíferos y que confía, continúen, porque hace falta mucha agua, aunque espera que no sean torrenciales, porque pueden suponer un perjuicio para las cosechas.

8 hectómetros cúbicos en una noche en el Torre de Abraham

La buena noticia que ha dejado la borrasca Efraín en la provincia ha sido el agua que está llegando a los pantanos, especialmente al de Torre de Abraham y al de Gasset que abastece a la capital y a los municipios del entorno.

El agua caída ha hecho que en el embalse de Torre de Abraham se hayan recibido 8 hectómetros cúbicos durante la noche de aportes procedentes de los ríos Bullaque y Milagro, que entran directamente en este embalse. Una cantidad que seguirá aumentando durante las próximas horas.

Además desde la pasada madrugada, desde el rio Bañuelos ha comenzado a entrar agua en el embalse del Gasset que ha incrementado sus reservas en más de medio hectómetro cúbico.

Agua almacenada que vienen a garantizar el abastecimiento para dos años y que si se siguen incrementando las reservas se pueda dar agua para regar en la zona de Torre de Abraham, especialmente afectada en los últimos años por las restricciones, según ha avanzado en la SER, el presidente de la CHG, Samuel Moraleda.

La comarca de Ciudad Real consume entre 10 y 12 hectómetros cúbicos al año

El de Peñarroya, también está incrementando la cantidad de agua embalsada con la alimentación de las Lagunas de Ruidera, pero de forma más discreta, según decía Moraleda, mientras que el resto de pantanos de la provincia, dependientes de la CHG, no se ha movido mucho.

Lo que todavía está por confirmar es el agua que se está movilizando en el río Gigüela, que es el que nutre al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. El presidente de la Confederación se muestra prudente, ya que este río se considera "perdedor" al ir alimentando acuíferos, pero espera buenas noticias para que el Parque no tenga que depender de recursos ajenos.

Según el SIRI, el Sistema de Información de redes Automáticas del Guadiana, este río tiene en estos momentos un cauce de 100 litros por segundo a su paso por la serranía de Cuenca, y de 1,5 desde Quintanar de la Orden.