La falta de vocaciones sacerdotales se deja notar en Castilla-La Mancha
Ciudad Real o Guadalajara son las dos provincias donde más se nota. En Cuenca la situación no es "angustiosa"
Cuenca
La falta de vocaciones sacerdotales es un problema desde hace años en el seno de la Iglesia Católica. En Castilla-La Mancha se ha dejado notar en zonas como Ciudad Real o Guadalajara en los últimos años, y afecta también a Cuenca aunque la situación, según su obispo, no es “angustiosa”.
El obispo de Cuenca, José María Yanguas, ha apostado por la llamada “pastoral vocacional”, y resalta la necesidad de que los futuros sacerdotes salgan del seno de la propia comunidad.
En un momento en el que la Iglesia Católica atraviesa una crisis de nuevos sacerdotes, que se está dando a nivel nacional, Yanguas ha reconocido que esa apuesta está dando “buenos resultados”. Admite que la situación en Cuenca es difícil, pero defiende la necesidad de seguir apostando por generar las vocaciones en el propio territorio.
En el Seminario Mayor de Cuenca hay diez seminaristas mayores y cuatro menores, según ha explicado Yanguas.