Juzgan a Félix Solís por la extracción ilegal de agua durante cinco años (en torno a un millón de m3)

Ciudad Real

El Consejero Delegado del Grupo de Bodegas Félix Solís tendrá que responder, este martes, en el Juzgado de lo Penal número 1 de Ciudad Real por un delito continuado contra los recursos naturales y el medio ambiente, así como por otro delito continuado de distracción de aguas. Se enfrenta a peticiones de entre dos a cuatro años de prisión. Tanto la Fiscalía como la Acusación Particular, también, solicitan dos años y medio de inhabilitación especial para ejercer su profesión y una indemnización al Estado de 84.000 euros por los daños y perjuicios ocasionados a los recursos naturales y al Medio Ambiente.

Unos hechos que denunció un agricultor de la comarca del Campo de Montiel, tal y como ha explicado en la Cadena SER el abogado que le representa, Juan Manuel Lumbreras. De hecho, el propio denunciante ha comparecido ante los tribunales en calidad de testigo que ha declarado que se encontraba realizando labores agrícolas en su finca y pinchó una tubería que había en sus propias tierras. Esa tubería, presuntamente, pertenece a una finca cercana, propiedad del Grupo Félix Solís y llevaría agua subterránea no declarada.

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Hechos producidos entre 2008 y 2013

Según recoge el escrito provisional de la Fiscalía Provincial, los hechos ocurrieron entre 2008 y 2013, en fincas de viñedos explotadas por el grupo en los términos municipales de Alcubillas, Montiel y Alhambra. Fincas en la que este grupo de bodegas se sirvió de uso de captaciones que no tenían derecho alguno de riego reconocido ni expediente en trámite en la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Durante estos años regó una superficie superior y distinta a la reconocida, detrayendo para ello de forma no autorizada, aguas subterráneas en numerosas captaciones.

Por todo ello, se estima que el total de agua extraída sin autorización entre 2008 y 2012, ronda el millón de metros cúbicos, cantidad más que suficiente, según los técnicos que han informado en el procedimiento, "para alterar de forma significativa el ecosistema sostenido por el acuífero 23, de la cuenca del Guadiana, influyendo de forma negativa en la preservación de otros ecosistemas dependientes del acuífero".

Una red de tuberías ilegales

El encausado, sin autorización, ni permiso ni licencia, interconectó los múltiples pozos de donde extraía el agua sin límite ni control entre sí, con el riesgo de producir hundimientos de los terrenos, bajo los que instaló la red ilegal de aguas para su riego y beneficio particular.

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Además, la Fiscalía añade que "las extracciones incontroladas de los acuíferos en estas fincas, para el mantenimiento del modelado agrario basado en el cultivo intensivo bajo riego con carácter industrial ha generado un importantísimo proceso de degradación ecológica del conjunto de humedales que constituyen la reserva de la Mancha Húmeda, que están en riesgo de desaparecer. Hace hincapié que la extracción de agua sin autorización genera un déficit hídrico al ser las recargas de los acuíferos menores a las cantidades detraídas sin autorización y repercute en el sostenimiento de los ecosistemas".

También, la propia Fiscalía pide a Félix Solís una indemnización a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en la cantidad que se tase pericialmente, para reponer el menoscabo originado al Medio Ambiente. Además, se solicitan doce meses de multa con una cuota diaria de 120 euros e inhabilitación especial para ejercer de administrador en empresas dedicadas a la producción, crianza, elaboración y exportación de vinos y demás productos similares.