Ganaderos sin pastos por la sequía: "La situación es crítica, esto es el remate"

Toledo

La sequía amenaza con agravar aún más la ya complicada situación de la ganadería en todo el país. En Castilla-La Mancha, la falta de lluvias está haciendo que los pastos, el principal alimento para muchos de estos animales, se seque o sea meramente testimonial. El sector ha empezado a hacer acopios de pienso y forraje ante el temor a que los precios de estos suplementos se disparen todavía más.

"La situación no es ya crítica, es lo siguiente. Se nos está formando la tormenta perfecta. Desde hace 18 meses o así empezó una subida de precios en los insumos increíble, como los carburantes o los piensos, y esto ya es el remate", explica Miguel Ángel Paredes, ganadero de Campillo de la Jara, en la provincia de Toledo, que posee unas 400 cabezas de ovino y caprino que, excepto algunas épocas del año, se alimentan básicamente con pastos.

La falta de precipitaciones en el centro del país desde prácticamente diciembre ha provocado que el pasto, que debería haber permanecido en buen estado hasta mediados de junio, esté seco y que sólo se pueda aprovechar algún cultivo que los agricultores van a poner en barbecho. "Salimos al campo dos o tres horas pero sólo para que el animal salga un poco a la naturaleza, corra y le dé un poco el aire", cuenta Alfonso Serrano, desde su explotación ganadera en la localidad ciudadrealeña de La Solana.

Este ganadero, la quinta generación en su familia, alimentaba a sus 300 ovejas y 30 cabras con pasto pero también con forraje y piensos, productos que, asegura, han triplicado su coste y que tratan de compensar gracias a la subida del precio de la leche que vende para fabricar queso manchego. Asegura no haber visto una sequía así desde el año 1994, con una primavera en la que prácticamente no ha llovido nada. "Va a ser la ruina", asegura.

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Sacrificar reses para ahorrar costes

Serrano es uno de los ganaderos de Castilla-La Mancha que este mes recibirá un ingreso en sus cuentas con las ayudas que el Gobierno regional concederá a agricultores de melocotón, albaricoque y nuez y a la ganadería extensiva, la más afectada por la sequía. En total, 19,5 millones de euros, de los que ocho irán a parar a los bolsillos de los ganaderos sin que hayan tenido que hacer ninguna solicitud.

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"No es mucho pero vamos subsistiendo también gracias a esa ayuda", esgrime Alfonso, que complementa sus ingresos en la ganadería con el cultivo del viñedo, el olivar o el cereal, cultivos que si no llueve en las próximas semanas también verán mermadas sus cosechas. "Es imposible que ahora mismo se inicie alguien en la ganadería", asegura rotundo. "Sólo aguantamos en esta profesión los que venimos de tradición familiar".

Miguel Ángel todavía no ha hecho acopio de pienso y forraje para alimentar a sus ovejas y cabras pero sí ha sondeado el mercado y asegura que hay almacenistas de paja que han dejado de vender a los proveedores porque saben que los precios subirán aún mas. Asegura conocer a ganaderos, sobre todo aquellos próximos a la jubilación, que han están sacrificando el 75 por ciento de su cabaña ganadera para destinarla al consumo de carne y evitar así el sobrecoste de los piensos.

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Ayudas directas para los afectados

Esta semana se celebra la Mesa de la Sequía y el Ejecutivo de Emiliano García-Page ha planteado al Ministerio de Agricultura poder utilizar parte de las ayudas del Programa de Desarrollo Rural en ayudas directas a los afectados, como ya ocurre con las destinadas a paliar los efectos de la guerra de Ucrania. El consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, ha explicado en la SER que ha enviado una carta al ministro Planas para que se puedan utilizar estos fondos.

"Es la Comisión Europea la que tiene que autorizarlo. No compete ni al Ministerio ni a las comunidades pero desde Castilla-La Mancha vamos a solicitar que podamos utilizar ese dinero para compensar de alguna manera a los agricultores y ganaderos que están viviendo estas dificultades por la sequía", afirma. Martínez Arroyo asegura que este tipo de ayudas directas para situaciones puntuales "dan muy buen resultado" y facilitan la gestión de las explotaciones.

Desde UPA Castilla-La Mancha recuerdan que el sector arrastra una situación muy complicada desde hace meses por los efectos de la guerra de Ucrania en los insumos, los focos de viruela ovina en la región o ahora la vacunación de la cabaña contra la lengua azul. "Todo son impedimentos y trabas para vivir tranquilo", lamenta Julio Corrochano, ganadero de vacuno en Toledo y responsable de ganadería en esta organización y que advierte: "Si el agua no viene pronto va a ser catastrófico".