Unanimidad en la Diputación Albacete para devolver la herencia de Purificación Urrea
El Pleno ha aprobado una modificación de crédito para pagar los 8 millones que la institución provincial adeuda a los familiares de Urrea, ya que la institución provincial ya ha reintegrado unos 3 millones a los herederos.
Pleno de la Diputación de Albacete celebrado este jueves
La Diputación de Albacete ha aprobado por unanimidad en el pleno extraordinario que se ha celebrado este jueves, la modificación de crédito que permitirá saldar la deuda, que en total asciende a 11 millones, con los familiares de Purificación Urrea, que dejó su herencia a la institución provincial, si bien no se han cumplido los deseos de la fallecida y por ello, la Diputación ha sido condenada a devolver los bienes y pagar dicha cantidad.
En concreto, este jueves se ha aprobado una modificación de crédito para pagar los 8 millones que la institución provincial adeuda a los familiares de Urrea, ya que la institución provincial ya ha reintegrado unos 3 millones a los herederos.
Ahora, el acuerdo de pleno tendrá que estar veinte días en exposición pública y será una vez transcurrido este tiempo cuando la Diputación podrá pagar los 8 millones que adeuda y, de este modo, dar cumplimiento a la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 5 de Albacete, que obliga a la Diputación de Albacete a devolver la herencia, por no haber puesto en marcha "un hospital para niños pobres", como dejó por escrito Urrea en su testamento.
El vicepresidente económico de la Diputación de Albacete, Fran Valera, durante su intervención en el pleno, ha recordado que una vez devueltos todos los bienes, ya que además del dinero la Diputación debe devolver también varias fincas -una de ellas en Albacete capital- la sentencia fija un plazo de diez meses para que los herederos constituyan la Fundación con la que gestionar ese hospital que pidió Urrea, para que se pueda dar cumplimiento al deseo de la fallecida.
Valera ha señalado que la Diputación, hace unos años, llegó a un acuerdo con uno de los herederos y le compró su parte de la herencia, por lo que en última instancia la institución provincial es propietaria de parte de esa herencia y, por ello, formará parte de esa fundación.
"Vamos a ser igual de exigentes que han sido con nosotros ante ese incumplimiento que nos achacan y esa mala fe que se presume a la Diputación", ha advertido Valera, que ha añadido: "Lo exigiremos a todos los herederos".
El juzgado condenó a la Diputación al pago de 11 millones de euros por el rendimiento que entre 1968 y 2014 obtuvo de las fincas rústicas vinculadas a la herencia que la institución provincial recibió de Purificación Urrea.
Una de las fincas está en Albacete capital, la de ' + Char(39) + 'Las Tiesas' + Char(39) + ', sede del Instituto Técnico Agrario Provincial (ITAP) y donde se han llevado a cabo diversos estudios de investigación.
También se incluyen la finca San Gregorio, en Alpera; y Casa del Pozo, en Valdeganga, ambas en esta misma provincia.
En julio del año pasado, la Audiencia Provincial ratificó la sentencia del Juzgado de Primera Instancia de Albacete y, aunque cabía recurso ante el Tribunal Supremo, la Diputación decidió, también por unanimidad, no recurrir. .
A finales de la década de los 60, con la muerte de Purificación Urrea, la Diputación de Albacete recibió su legado. En su testamento, reflejaba la condición de que la misma debía destinarse a la construcción de un hospital para niños pobres "enfermos y desvalidos" que nunca se llegó a realizar.
Urrea había pedido, inicialmente, que su herencia pasara a la congregación San Juan de Dios, con la condición de que en sus terrenos se levantara ese hospital para atender a niños pobres "enfermos y desvalidos" y si la congregación lo rechazaba -como así sucedió- iría a la Diputación de Albacete, que su padre había presidido años antes.
Entre su herencia, que está inventariada al detalle, había incluso algunos muebles que han estado en el palacio que acoge la institución provincial y hasta un viejo Mercedes, si bien el principal valor estaba en las fincas.
El asunto ha estado en los tribunales más de 20 años, puesto que fue en el año 2000 cuando sus sobrinos denunciaron a la Diputación por no haber construido el recurso que había pedido por escrito Purificación Urrea como última voluntad.
En "Las Tiesas", durante años, sí llegó a haber un centro de atención a drogodependientes, pero nunca el proyecto que Urrea había pedido al ceder su herencia a esta institución.
En pocas semanas, sus bienes pasarán a manos de sus sobrinos y la Diputación dará el carpetazo definitivo a este asunto




