De Talavera al Sur de Marruecos: "entregamos el material personalmente, sin intermediarios"

Talavera de la Reina

No les duelen prendas en reconocer que todo empezó por un "no hay huevos", pero, ¡benditos huevos! Un buen día, hace ya 5 años, la Asociación de Vecinos Las Moreras, pensó en visitar Marruecos y pensaron además que ese viaje lo harían en sus motos. Y ahí, comenzó todo.

En motos al sur de Marruecos

Hay quien pensó que si iban a hacer ese gran viaje y vivir esa experiencia, por qué no aprovecharlo de una manera altruista. Podrían seguir viviendo la experiencia y unir placer con solidaridad y eso hicieron. Empezaron por crear el Proyecto Lápices Moteros, una colaboración solidaria que aportaría material escolar y prendas de ropa a los niños y niñas de las escuelas rurales del sur de Marruecos (Merzouga).

"Es una experiencia única, poder viajar a Marruecos, pero también colaborar con gente que ves que no tienen nada y que a pesar de ello son felices... Con las cosas que les damos, tan solo le facilitamos algo la vida, pero - desafortunadamente - no se la cambiamos", dice uno de los miembros y participantes de la asociación, Marco Otero.

Un proyecto que se ha desarrollado sin ningún tipo de ánimo de lucro y en donde todos los fondos recaudados van directamente a los gastos derivados de la puesta en práctica del proyecto. El objetivo fundamental es recoger material escolar, juguetes y calzado, a través de particulares, fundaciones y otras organizaciones.

Recogida de material hasta el 25 de agosto

En esta quinta edición de Lápices Moteros, ya está abierto el plazo para donar material de todo tipo hasta el día 25 de agosto, ya que el viaje lo emprenderán del 1 al 10 de septiembre. "Tan solo hay que llevar el material escolar y prendas a la sede de la AAVV Las Moreras, en la Calle Pablo Neruda, número 5. Si en ese momento está cerrada, el bar que hay justo en frente colabora con nosotros y el dueño abre la sede" ha asegurado el presidente de la asociación, Pedro Otero.

Otero también reconoce que la gente se implica mucho y que lo da todo, "luego hay otras que tienen reticencias porque no saben cómo se entrega, pero les aseguramos que se lo entregamos personalmente a las familias, no hay intermediarios". El material lo llevan en las motos y también en una furgoneta del equipo y allí, cuando llegan a las aldeas, se lo dan a los niños y niñas. "Se llaman entre ellos por las aldeas y chozas y poco a poco van llegando...". Allí cuentan con la colaboración de la ONG Camino al Sur cuya persona de contacto es Mustafa Ouahidi, más conocido como "Dris".

Sobre él cuenta el presidente que "lo conocimos de casualidad y nos ha apoyado durante todas las ediciones. Nos ha enseñado su país y su gente, sin Dris no hubiera sido posible. Como en todos los sitios, hay gente de todo tipo, y él es muy buena gente".

13 amigos y amigas, 10 motos ,1 vehículo de apoyo y 600 kg de material

Actualmente, el proyecto está formado por 13 amigos y amigas, 10 motos y un vehículo de apoyo. Suelen trasladar unos 600 kg de material escolar, prendas y calzado infantil. Desde la asociación insisten en que lo que quieren es concienciar de la necesidad de colaboración con estos niños de un país vecino. "Para ellos una botella de agua vacía es un mundo porque se convierte en un utensilio para transportar agua, ir rellenándolo en medio del desierto. Es una zona a la que no llega nada...", dice Antonio Serrano otro de los participantes.

De allí, los participantes coinciden en que se traen ilusión, energeía y fuerza. Allí encuentran, lo que aquí en España como país desarrollado no encuentran, la felicidad en las pequeñas cosas y la alegría de vivir. "En general, todos preparamos esta cita con ilusión, preparamos las motos y cuando se incorpora alguien, le hacemos partícipe de todo. Hay dos Marruecos, uno que todo el mundo conoce, y otro que no, el más necesitado", dicen durante la entrevista los miembros anteriomente mencionados.

Dispuestos a ampliar el grupo

A la pregunta, ¿se puede unir la gente? contestan firmemente que sí. "Es muy gratificante cuando alguie nuevo se viene con nosotros, nos ilusiona. También, vemos la tristeza cuando alguien ha ido años anteriores, pero en esta edición no puede", dice el presidente. Y a otra pregunta... ¿Qué le pedimos a los ciudadanos?, los participantes dicen que ahora que es tiempo de fin de curso, todos esos cuadernos que se han quedado a medio escribir y que probablemente, no se tiren, pero sí se queden en un cajón guardados, que los donen. También que aprovechen los cambios de armarios.

Marco Otero añade "yo pediría que la gente fuera más consciente de esta posición que tenemos del primer mundo y que no valoramos. Este país, Marruevos, que tiene condiciones super díficiles, da cobijo a personas que son felices".