El adiós de Fernando Alarza

Talavera de la Reina

"Con nostalgia pero con ilusión por el futuro". Así describe su despedida un grande del deporte, un talaverano Fernando Alarza que, después de anunciar su adiós en redes sociales, expresa a SER Talavera sus sentimientos y objetivos de cara al futuro.

"Media vida dedicada al triatlón de forma profesional”

Se inició competitivamente en su “amado deporte”, dice, con 16 años, pero al triatlón como tal desde que tiene uso de razón. Por eso, al mirar atrás, siente nostalgia, “pero cuando la decisión es muy meditada y no es forzada por una lesión como les puede pasar a muchos deportistas, todo se encaja mejor. Ha sido una etapa de mi vida, todo tiene un final y el cambio va a ser muy positivo”, reconoce.

Esa nueva etapa a la que se refiere es entrar en el Cuerpo Nacional de Policía “un sueño que tenía desde pequeñito y que tuve que aparcar a los 18 años para centrarme en el C.A.R. (Centro de Alto Rendimiento, en Madrid) y en un futuro olímpico”, y así fue como inició el camino hacia ese objetivo deportivo.

Una de sus primeras victorias fue en 2010, cuando se proclamó campeón del Mundial Juvenil de Triatlón. Obtuvo dos medallas de oro en la Copa de Europa de Triatlón de 2013 (Quarteira, Portugal), bronce en el Campeonato Mundial de Triatlón de 2016 (Cozumel, México), plata en el Campeonato Europeo de Triatlón de 2018 (Glasgow, Reino Unido)... La disciplina, el trabajo y la pasión han sido su motor. “Siempre me he sentido muy agradecido y afortunado de que todo haya salido bien porque si los resultados no acompañan, es muy difícil”.

Reconoce haber tenido suerte porque todo ha sido más fácil gracias a que su vida, sus amigos, giraban alrededor del triatlón. Admite que es un deporte muy duro, ya no solo por los entrenamientos, aunque él es un “apasionado del sufrimiento”, dice; sino porque ha tenido muchos momentos de soledad mientras viajaba a lo largo y ancho del mundo.

Deportista olímpico: estuvo en Río de Janeiro y en Tokio

Ese sueño de la infancia de ir a unas olimpiadas se hizo posible en el año 2016, cuando consiguió una plaza para los Juegos Olímpicos de Verano de Río de Janeiro, en Brasil, ocupando el 18º lugar; y cuatro años después, cuando participó en los juegos de Tokio 2020, en Japón, donde alcanzó la doceava posición en la prueba individual. “Me hubiera gustado estar en París 2024, pero estaré de otra forma con la selección”, dice.

Los Juegos Olímpicos han sido, considera, “regalos que te da el deporte. Llegas y te encuentras con los mejores deportistas del mundo, con personas que ves desde pequeño y resulta que tú eres uno de ellos. Todos estamos por el mismo sueño, la pasión, el espíritu es compartido aunque seamos de diferentes países o deportes”.

Talavera volcada con Alarza una vez más

El deportista es muy querido en la ciudad, donde ha vivido momentos muy especiales como el recibimiento que se le hizo junto a los otros dos olímpicos talaveranos, la karateka Sandra Sánchez y el piragüista Paco Cubelos. “Los tres hemos hecho cosas muy grandes en el deporte, hemos puesto el nombre de Talavera en el mundo, y eso es muy especial. Lo que nos ha dado la ciudad es mucho más de lo que nos podíamos esperar”, dice con orgullo.

Ha recibido muchos mensajes de cariño, pero valora especialmente las llamadas de quienes fueron sus rivales en competición “y eso toca el corazón porque estuvimos jugándonos los mundiales, pero al final todos vamos a pasar por lo mismo”.

Se va Alarza, pero promete “seguirnos viendo, aunque a partir de ahora fuera de esa alfombra azul y detrás de las vallas. Comienza mi nueva vida en la que representaré con orgullo a mi país como hasta ahora, pero con otro uniforme”, apunta en redes sociales.