Guardia Civil y Agentes Medioambientales intensifican la vigilancia en Las Chorreras
El objetivo es hacer cumplir las nuevas normas establecidas por la Consejería de Desarrollo Sostenible para evitar accidentes
Guardia Civil y Agentes Medioambientales vigilan Las Chorreras / Guardia Civil
Motilla del Palancar
El pasado uno de junio entraba en vigor la nueva ordenanza que tiene como principal objetivo evitar accidentes y preservar el paraje natural, para ello establece normas como aforo máximo diario de 300 personas o la regulación del baño y las actividades acuáticas. Durante esta época estival Guardia Civil y Agentes Medioambientales han intensificado la vigilancia del paraje para lograr que se cumplan todas estas normas. Tal y como nos contaba hace unas semanas el alcalde de Enguídanos, Sergio De Fez, si esta normativa fuese insuficiente cabe la posibilidad de endurecer las medidas.
Por el momento, los agentes han atendido a diversas personas por golpes de calor y han formulado numerosas denuncias por bañarse en zonas prohibidas, cabe destacar que el número de accidentes ha descendido considerablemente con respecto al verano pasado. Las labores de vigilancia se mantendrán durante todo el verano.
Plan parcial para regular el paraje de Las Chorreras del Cabriel
Desde el uno de junio no podrán acceder a las Chorreras del Cabriel más de 300 personas al día, deberán hacer reserva previa de su plaza y del parking y no podrán acceder con bebidas alcohólicas. Además, existe la posibilidad de tomar medidas más drásticas por Resolución de urgencia en caso de que se detecten situaciones de riesgo para los visitantes o de deterioro para el paraje. Afirma el alcalde de Enguídanos, Sergio De Fez, que son medidas encaminadas a evitar riesgos y conservar el paraje.
Se trata del nuevo Plan parcial aprobado por la Consejería de Desarrollo Sostenible y publicado en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha en el que se regulan las actividades de uso público en el Monumento Natural de las Chorreras del Cabriel. Una serie de medidas que se venían demandando desde hace tiempo debido a la masificación de visitantes que sufre este paraje principalmente en los meses estivales. Afirma De Fez que la idea es que se pueda seguir disfrutando del paraje sin riesgos y para ellos hay unas mínimas normas que hay que cumplir.
Las medidas indican la prohibición de bañarse fuera de las zonas permitidas para ello, y la prohibición de usar las rampas tobáceas para deslizarse o lanzarse al agua. Además, también indica medidas para la visita de mascotas, que pueden entrar, pero siempre con correa y no podrán bañarse ya que afirma el alcalde que también en los últimos veranos ha habido un aumento de accidentes de animales de compañía. De Fez asegura que en general la gente está de acuerdo con estas medidas porque son positivas para todos.
Con respecto a las actividades acuáticas incluidas en el ámbito de esta orden podrán realizarse tanto en el río Cabriel aguas abajo de la confluencia con el río Guadazaón (rafting, stand up paddle, hydrospeed, piragüismo), utilizando como punto de inicio el embarque existente, como en el tramo situado sobre la presa de Víllora (stand up paddle, piragüismo), respetando en cualquier caso las condiciones y limitaciones establecidas por el organismo de cuenca.
