Cumple 1 año la planta de pistacho más grande de Europa, situada en Argamasilla de Alba

Argamasilla de Alba

La planta procesadora de pistacho más grande de Europa, situada en el término municipal de Argamasilla de Alba (Ciudad Real), ha cumplido un año "cumpliendo los objetivos con creces". IberoPistacho aterrizaba en la localidad manchega hace 1 año y el balance es positivo, como han indicado en la SER.

Castilla-La Mancha quiere posicionarse como uno de los grandes productores de pistacho del mundo, y en realidad ya se encuentra en un lugar privilegiado, por su clima y tipo del terreno. Solo lugares como California e Irán superan a nuestra región en el cultivo de este oro verde.

La elección de Argamasilla no es casualidad, y es que Castilla-La Mancha lidera la producción a nivel nacional de pistacho mientras que a su vez España lidera el ranking europeo. Y otro dato: el 80% de la superficie de cultivo de pistacho está en la región manchega.

Para este año, en IberoPistacho quieren triplicar por tres el volumen que realizaron el año pasado. "Sinceramente, estamos contentos. Hemos ajustado el procesado para ser más eficientes, con un buen tratamiento al coste y a la calidad", ha explicado Juan Gallego, fundador del grupo IberoPistacho.

La planta de Argamasilla está formada por una treintena de trabajadores, gran parte de ellos de la comarca de La Mancha. Un empleo que además es joven. "Vienen de Ciudad Real, Daimiel, Manzanares, Villarta de San Juan, Tomelloso y, por supuesto, Argamasilla. Son personas del entorno", ha dicho. "También estamos afectando a la economía socio-rural, acogiendo a productores que tienen fincas pequeñas", ha apuntado.

Y es que el pistacho, a parte de ser muy rentable, es un cultivo leñoso, lo que significa que necesita poca agua para dar frutos, algo que viene como anillo al dedo a una región tan seca como la nuestra. "Tiene un buen porcentaje de grasas buenas, es un potenciador sexual y te ayuda a dormir mejor", ha explicado sobre las bondades del producto. "En cuanto el consumidor lo aporta en su vida diaria, rápidamente empieza a notar sus efectos", ha dicho.

Mermeladas, aceites e incluso maquillaje. Nada se escapa al pistacho, y todo apunta a que seguirá siendo un sector clave en la economía manchega.