José Joaquín Gómez, de Mancha Occidental II: "Firmaba por mantener las dotaciones de este año"

Ciudad Real

A finales de noviembre, la Confederación Hidrográfica del Guadiana convocará las diferentes Junta de explotación, las reuniones que fijan las cantidades de agua que los agricultores pueden utilizar para regar, y pese a que se esperan lluvias para los próximos días, la mala situación hídrica hace prever que, como mínimo, se mantendrán las dotaciones de este año, que ya eran restrictivas con lo que tenían asignado.

De hecho, el presidente de la comunidad de usuarios de aguas subterráneas Mancha Occidental II, José Joaquín Gómez, ya adelanta que la tendencia es a la baja en los niveles de los acuíferos y espera que la llegada de las precipitaciones marque un cambio hacia un ciclo más húmedo, tras años de sequía y de pluviometría a la baja.

Y es que aunque ha llovido, ha sido algo por debajo de la media; a lo largo de este año han sido unos 350 litros por metro cuadrado cuando la media es de unos 400 litros. El principal problema es como han llegado las precipitaciones, ya que han sido de manera torrencial lo que ha hecho que el agua haya corrido y no se haya filtrado al acuífero.

En estos momentos los embalses de la zona oriental de la cuenca del guadiana almacenan casi 73 hectómetros cúbicos, lo que es poco más del 18 por ciento del total que pueden almacenar. En cuanto a los acuíferos, las últimas mediciones, que corresponden a agosto, marcan descensos con respecto al mismo mes del pasado año de casi 2 metros en la masa de agua Mancha Occidental II y 1,5 metros en Mancha Occidental I. Ambas formaban parte de lo que se conocía como acuífero 23, el de más extensión de Castilla La Mancha.