Una nueva vida para las vías en desuso del 'Trenillo'
En la provincia de Ciudad Real ya hay 17 kilómetros de antiguas líneas de ferrocarril que han sido reconvertidas en vías verdes.
Una nueva vida para las vías en desuso del 'Trenillo'
Ciudad Real
En España existían en 1993 más de 7.600 kilómetros de líneas que ya no tenían servicio de trenes, o que nunca llegaron a tenerlo por quedar inconclusas las obras de construcción. Ahora se les quiere dar un segundo uso con la creación de vías verdes. En el caso de la provincia de Ciudad Real, uno de los proyectos más destacados es el del trenillo de la Calzá
En la provincia ya hay 17 kilómetros de antiguas líneas de ferrocarril que han sido reconvertidas en vías verdes. Uno de los proyectos más destacados por su historia es el del Trenillo , la antigua línea que conectaba Valdepeñas con Puertollano, y sobre la que ya se han recuperado 11 kms para que sean ahora espacios verdes. La Fundación del Ferrocarril Vías Verdes es la que se encarga de ello.
estas vías verdes son muy valoradas por personas de movilidad reducida y por toda la población en general
— Arantxa Hernández, gerente Fundación del Ferrocarril Vías Verdes
Gracias a este proyecto el patrimonio de gran valor histórico y cultural como son las líneas férreas, está siendo rescatado de su olvido y la desaparición total, dado que ofrece un enorme potencial para desarrollar iniciativas de reutilización con fines ecoturísticos y de movilidad sostenible. El Administrador de Infraestructuras ferroviarias (Adif) es quien se encarga de ceder estas líneas ferroviarias también para recuperar el contexto de los que significaban las estaciones y los elementos que componían: brazos mecánicos, señales, etc.
han pasado todos ellos a ser instrumentos obsoletos a ser elementos históricos una vez que quedan dentro de las vías verdes
— Miguel Ángel Ferrero, jefe de patrimonio histórico de Adif
Historia
Promovida por pequeños empresarios, la línea se abrió en un primer tramo, de Valdepeñas hasta La Calzada de Calatrava, en diciembre de 1893. De esa primera estación término tomó el nombre popular del “Trenillo de la Calzá”: trenillo por su pequeñez frente a los grandes trenes de ancho ibérico vecinos en la estación de MZA de Valdepeñas; y de la “Calzá” por su término en Calzada de Calatrava. Pero 10 años más tarde Calzada dejó de ser estación término, y a esos 42 km iniciales de ruta se sumaron otros 33 km más (en los que se inscribe nuestra vía verde), por los que llegaban los trenes hasta la estación de Puertollano. En la provincia, otro proyecto de restauración y rehabilitación pasa por la Estación de Cabezarrubias del Puerto, con el Ayuntamiento de Puertollano y el Club Cicloturista ‘Caminos y Cañadas’.