Además de mirar al cielo ASAJA y UPA piden "más ambición" a las Administraciones para garantizar infraestructuras hidraúlicas en el nuevo año

De cara al nuevo año, las organizaciones agrarias ASAJA y UPA miran más que nunca al cielo, confiando en que lleguen las lluvias y piden a las Administraciones que agilicen las infraestructuras hidraúlicas porque sin agua no hay futuro.

La sequía extrema ha puesto en jaque a la agricultura y ganadería, en un año en palabras del secretario general de la UPA, para olvidar, como consecuencia, entre otros factores, por la falta de precipitaciones que de momento no llegan y que han vaciado embalses y acuíferos. Según el último parte de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, en la última semana del año, los embalses de la cuenta Alta del Guadiana se encuentran bajo mínimos, al 17% con 69 hectómetros, con pantanos como el Vega del Jabalón seco desde hace más de un año.

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250 millones pendientes para el Alto Guadiana

Julián Morcillo señala que se va el 2023, año en el que ha echado a andar la tubería manchega pero queda una asignatura pendiente, la reactivación del consorcio del Alto Guadiana, -en la Mancha Occidental, la de mayor extensión de regadíos- para el que el Ministerio de Transición Ecológica había comprometido 250 millones que están por llegar. De ahí que pida a las Administraciones que cumplan y sean más ambiciosas en las infraestructuras.

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También el presidente nacional de ASAJA, Pedro Barato reitera que sin agua no hay futuro para el campo, es un objetivo en el que hay que caminar unidos y volvía a defender que los agricultores están muy sensibilizados y consumen el menos agua posible para sus explotaciones, agricultores que un año más se enfrentan a recortes en las dotaciones de riego, de hasta el 15%.

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Limitaciones que van a continuar en la próxima campaña, si no se revierte la situación, de hecho como recuerda Julián Morcillo, Castilla La Mancha es la única región española donde se han aplicado recortes del más del 50% en las dotaciones en los últimos 30 años.

Un año complicado en todos los sectores, especialmente por la climatología, que ha llevado a que se pierda el 90% de la cosecha de cereales, que en la campaña de la aceituna no lleguemos ni al 50% y con una mala brotación en el viñedo que también augura un 2024 malo.

Nuevo año el que esperan que se flexibilice la nueva PAC, que lleguen las compensaciones para los ganaderos que en muchos casos han visto mermar sus rebaños por la viruela, la tuberculosis y la enfermedad hemorrágica.

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César García, ganadero en Zarzuela, en plena Serranía de Cuenca, donde se han registrado las temperaturas más gélidas de toda España -9º- nos cuenta cómo es el día a día de un pastor en pleno invierno y cómo debe proteger y cuidar a sus ovejas. En la fotografía se puede apreciar cómo se han congelado los bebederos.