"Hay más palomas que habitantes": el problema en un pueblo de Toledo que van a combatir con águilas y búhos reales

Toledo (Toledo)

La localidad toledana de Torrijos ha iniciado una batalla contra las palomas. Unas aves que, asegura, provocan diversos daños en el Patrimonio y, también, en diferentes viviendas. En esta línea, el alcalde de esta población, Andrés Martín, ha subrayado, en una entrevista en 'Hoy por Hoy Toledo' de la SER, que "hay más palomas que habitantes". Todo ello, porque según diferentes estudios se estima que la sobrepoblación de estos animales supera los 15.000 ejemplares, cuando esta localidad apenas sobrepasa los 13.000 habitantes censados.

Una sobrepoblación de palomas, asegura Martín, que es una problemática que lleva arrastrando Torrijos desde hace varios años y, ahora, se ha optado por realizar un plan de choque para diminuir sensiblemente el número de ejemplares. En esta línea, el alcalde de dicho municipio ha detallado que se espera disminuir en más de un 50% el número de palomas en el término municipal.

La suelta de águilas y búhos reales: una de las soluciones para disminuir el número de palomas

Un plan de choque contra las palomas en esta localidad toledana que incluye la suelta de águilas y búhos reales para disminuir el número de ejemplares de aquellos animales. De este modo, Martín ha explicado que esta iniciativa no conllevará una reducción drástica de las palomas, sino que creará los condicionantes para que su presencia sea más difícil.

Una práctica, la de la cetrería, que se ha iniciado este lunes en Torrijos y que, con ello, se han producido diferentes cortes de calles al tráfico durante la matinal. Unos cortes para posibilitar que el vuelo de estas aves se realicen con mayor seguridad y que no encuentren distracciones en los distintos vuelos que han realizado en este municipio.

También, Martín ha alertado que, incluso, algunos vecinos de esta población "no duermen" porque es demasiado excesivo. En este aspecto, ha recordado que, por ejemplo, se pueden dar diversos problemas de salubridad al contar con más de 15.000 ejemplares en el casco urbano y su entorno. Problemas, señalaba, como que una de estas palomas deposite sus excrementos en la comida que llevan los camareros desde los establecimientos a las distintas terrazas. Una problemática que desde el consistorio esperan poder mitigar y, por ello, el plan de choque se prolongará todo el tiempo que sea necesario hasta que se consiga una reducción notable de esos ejemplares de palomas.