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Ocio y cultura

Nuevo reconocimiento para el Festival de Almagro: Premio Talía por el Cambio Social y la Inclusión en las Artes Escénicas

La directora Irene Pardo destaca el compromiso social del certamen que apuesta por ser más inclusivo y accesible

Compañía "La porciúncula", grupo de teatro de la ONCE que ha participado en la 46 edición del Festival de Almagro / Festival de Almagro

Nuevo reconocimiento para el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro. Esta vez ha sido galardonado por la Academia de las Artes Escénicas de España, con el Premio Talía por el Cambio Social y la Inclusión en las Artes Escénicas patrocinado por la ONCE.

Un reconocimiento que se suma a la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y a la distinción como mejor evento cultural de Castilla-La Mancha, y que nació el pasado año para reconocer la excelencia del sector y el valor de todas y cada una de las profesiones y manifestaciones creativas que contribuyen a hacer del hecho escénico una expresión esencial.

En palabras de al directora, Irene Pardo, una vez más se pone en valor, el potencial y el compromiso social de un certamen cada vez más social, inclusivo y accesible, para todos y todas, el reconocimiento de la cultura como un derecho universal y no como un privilegio.

Destaca que Almagro es mucho más que teatro clásico, sea un punto de encuentro donde a través de las artes escénicas, se nos invita a conocernos mejor y a reconocer las diferencias.

Las medidas del Festival de Almagro para garantizar la cultura como un derecho universal

Hay que recordar que el Festival viene apostando porque las personas con discapacidad puedan asistir y disfrutar de los espectáculos, y para ello ha implantado sistemas como la audiodescripción, el bucle magnético, el sonido amplificado y el sobretitulado para personas sordas, que se sumaron a otras iniciativas como los paseos escénicos ‘táctiles’ para personas con discapacidad visual que se llevaron a cabo en las obras de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.

Todos los espacios escénicos están dotados con sistemas de apoyo para personas con discapacidad auditiva. Además, en colaboración con el Museo Nacional del Teatro, organizan talleres dirigidos específicamente a personas con discapacidad intelectual, talleres como los que se organizan con asociaciones locales como AMFISA.

Este compromiso se ha visibilizado también en la programación de la 46ª edición del Festival de Almagro, con obras como "El avaro", a cargo de la compañía La Porciúncula, uno de los grupos de teatro de la ONCE e integrado por personas con distintos grados de discapacidad visual, e "Hijas de la comedia", propuesta de Teatro Yeses, conformado por mujeres internas en la prisión de Carabanchel.

El Festival de Almagro que también se ha marcado como objetivo esencial sensibilizar a las compañías sobre la importancia de generar contenidos que involucren a los públicos más allá de la representación, propiciando encuentros, coloquios, charlas o materiales pedagógicos.

La perspectiva de género y educativa del Festival

Conscientes de la importancia de la educación, el enfoque social del Festival también se ha orientado hacia los jóvenes, con una comunicación y unas actividades especialmente dirigida a ellos; mientras que también se ha impulsado la contratación de jóvenes para la cita dedicada al Siglo de Oro. Desde la perspectiva de las propias compañías, el Festival ha promovido la profesionalización a través de Encaje Almagro, que ha ofrecido oportunidades de crecimiento y asesoramiento a compañías emergentes en encuentros como el desarrollado con aquellas que componían el certamen Almagro Off.

La perspectiva de género ha recorrido un Festival en el que se ha fomentado la producción y visibilidad de dramaturgias y direcciones femeninas, no sólo desde la propia programación, sino, desde talleres que, partiendo de los propios textos clásicos, han indagado en la condición femenina en el Siglo de Oro y sus vínculos con la actualidad, como el taller «La voluntad de un cuerpo», dirigido por la dramaturga Vanessa Espín o el laboratorio escénico «El placer», bajo la batuta de la directora de escena Marta Pazos. Además, para facilitar la conciliación familiar, Almagro ofreció un servicio de ludoteca para impulsar el acceso a la cultura de las familias.

Este 2024, se ha puesto en marcha un Proyecto de Mediación Cultural dirigido a centros educativos en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha y La Red Española de Teatros, a través del Proyecto Ornitorrinco, y se han establecido diferentes reuniones con instituciones tanto públicas como privadas para el desarrollo de un Plan Transversal de Accesibilidad del Festival que esperamos que vea sus frutos en próximas ediciones.