"Las nietas de las brujas que no pudisteis quemar"

Talavera de la Reina

Nací en 1996, hace 27 años y escucho a muchas mujeres decirme, "menos mal que no naciste hace 80 años, las mujeres no podíamos hacer nada, qué suerte has tenido". Y sí, menos mal que nací hace poco.

Pero aún, compañeras, continuamos en la lucha. A veces hay que gritar un poco más fuerte en una reunión de hombres trajeados para que tú criterio se respete. Hay que dar un paso atrás o al frente, para decirle a un tipo superior a ti que ni se le ocurra tocarte.

Hay que hablarle a tú familia sobre tus sueños, tus aspiraciones profesionales para que acepten que no vas a ser una mujer normal, su mujer normal. No te vas a casar, no vas a tener hijos y tampoco vas a aprender a cocinar. Y si me lo puedo permitir, voy a viajar por todo el mundo cuando y con quién me de la gana.

Pero también tenemos que controlar la frustración, porque no nos creen, porque exageramos, porque somos unas radicales.

Lo que somos, señoros, y digo señoros porque es muy diferente a ser un señor de los pies a la cabeza, somos mujeres íntegras, válidas, inteligentes, organizadoras y competentes. Que podemos sí, ser las mejores madres del mundo, pero también las mejores médicas, taxistas o periodistas.

Podemos ser lo que nos de la gana y aunque lo estudios piensen que quedan más de 100 años para conseguir la igualdad real entre mujeres y hombres, les digo que seguimos aquí, que cada vez somos más, pese a todo y todos.

Y sí... queda mucho. Por el momento, yo voy a seguir leyendo a compañeras que me llenan el alma y la autoestima., llámense Clara Campoamor, Espido Freire o Ame Soler. Y de esta última recojo el titulo de su libro: "Somos las nietas de las brujas que no pudisteis quemar".