Opinión

Imagina Talavera

La columna de opinión del profesor de historia en el instituto Gabriel Alonso Herrera, ensayista y activista político; Fidel Cordero

ESCUCHA LA COLUMNA DE OPINIÓN DEL FIDEL CORDERO

ESCUCHA LA COLUMNA DE OPINIÓN DEL FIDEL CORDERO

Talavera de la Reina

Imagina una Talavera de cuento, de uno de esos cuentos felices de Oscar Wilde, como el Ruiseñor y la Rosa, o el Gigante Egoísta, en los que el final feliz supera al dolor previo, y nos quedan las enseñanzas positivas, con mucho ánimo para encarar el día.

La otra mañana, al amanecer, paseando con mi perro por la calle Chile, temeroso por algún aviso vecinal de que el arboricidio sistemático que asola nuestra ciudad viniera a ensañarse con esa doble hilera de arbolillos que en esta calle peatonal tan buena sombra nos da en el verano, me apoyé en uno.

Y viendo que abría ya en estos mediados de marzo sus manos verdes, con mucho cuidado comencé a retirarle los brotes que le salían del tronco, esos 'chupones', hasta más arriba de mi cabeza, yemas casi, tiernas, que evidentemente sobraban para que el resto de la copa hiciera sombra.

Así, distraído, mientras mi perro olisqueaba, arreglé un par de árboles, pensando como de costumbre que era una lástima no disponer de más tiempo para hacer la misma tarea en todos los árboles del paseo. Así evitaría que se hicieran ramas duras, y molestas, que diera más trabajo retirar más tarde, o que de alguna forma justificasen luego el maltrato, o la poda a destiempo, o la tala incluso, con la excusa de no sé qué enfermedades, y molestias, y peligros, y suciedades, que atribuyen siempre los arboricidas a los pobres árboles.

Y cuál ha sido mi sorpresa esta mañana cuando, como en esos cuentos felices, al volver a salir me encontrado la tarea completa. No sé si ha sido obra de las personas encargadas de la jardinería en la comunidad vecinal, o de las de los propios servicios municipales, o de aquel sin techo que vagabundeaba en la calle cuando me vio hacerlo, o de esa otra vecina que cuida de su hijo y me preguntó qué hacía... no lo sé. Pero he tenido la sensación casi mágica de que una serie de manos amigas habían completado la labor. Y he sentido una satisfacción enorme, cómo si hubiera asistido a un pequeño milagro, como si de verdad existiera esa mano invisible, qué no es la de Adán Smith y su egoísmo útil sólo de rebote, sino esa mano solidaria, que sin que sepamos quién es, ayuda a completar una tarea.

El buen ejemplo, el acto generoso, o sencillamente hacer lo que nos pide el sentido común en beneficio de toda la Comunidad. Una atención, un cuidado mínimo ahora, para garantizar un futuro mejor, aunque sea simplemente una sombra, unos grados menos cuando el calor agobie.

Esa Talavera, la de esta mañana, común y mágica, es la que nos hace que sigamos teniendo fe en Talavera, en su gente, y en su futuro.

SER Talavera

Fidel Cordero

Fidel Cordero

Defensor de la participación política en la línea del pensamiento comunero, a partir del 15M me integré...

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00