100 años de la Citroën en Talavera
La columna de opinión del historiador y profesor talaverano, Ángel Monterrubio
100 años de la Citroën en Talavera
Talavera de la Reina
Se cumplen cien años de la Citroën en Talavera. Manuel Costales Nava regentaba en la ciudad una pequeña tienda de repuestos del automóvil, Auto Garaje Central, se llamaba, en la Plaza del Padre Juan de Mariana, junto al Ayuntamiento. Vendía cubiertas, pinturas, equipos eléctricos, gasolina, gasoil, benzol, aceites y reparaba y cargaba acumuladores.
En 1924 Manuel Costales tiró la casa por la ventana y se quedó con la representación de la Agencia Oficial Citroën para la provincia de Toledo de los vanguardistas automóviles de André Citröen y presentó en la ciudad su nuevo modelo, el Citröen B10, que introducía en Europa, por vez primera, chasis y carrocería totalmente de acero, diseñadas por el ingeniero estadounidense Edward Gowan Budd .
El nuevo concesionario tuvo de inmediato un gran éxito de ventas, que sobrepasó con creces todas las expectativas del empresario, ya que era un vehículo moderno, atractivo y a un precio razonable.
La gran mayoría de los taxistas de Talavera y de la provincia se pasaron a Citröen. En una becerrada que organizaron los “chauffeurs” -como se decía en la época- en la plaza de toros, dos de los pequeños “bipersonales” de la marca, para la cosa de la propaganda, hicieron las veces de caballos de los alguacilillos, que subidos en ellos despejaron la plaza entre las ovaciones y el cachondeo del público talaverano.
Ángel Monterrubio
Diplomado en Profesorado de E.G.B., Licenciado...