José Ignacio, joven con sordoceguera: "Con las adaptaciones necesarias, se puede hacer de todo"

Toledo

La ONCE presta asistencia a 3.500 personas con sordoceguera en nuestro país; unas 150 de Castilla-La Mancha. Una doble discapacidad que no es muy conocida y sobre la que hace falta concienciar.

La sordoceguera puede ser congénita, pero también adquirida, por lo que cada caso es único y requiere de una asistencia técnica y humana distinta. José Ignacio Antoranz es de Guadalajara, tiene 22 años y quiere ser docente. A los 5 años se quedó ciego y, después, comenzó a perder audición. Ahora, hace de todo, asegura.

"Con las adaptaciones que se deban, se puede estudiar porque yo, de hecho, estoy haciendo una carrera", afirma. Asegura también que "se puede hacer deporte, de hecho soy esquiador", y que "se puede leer o se puede comunicar".

Lourdes Vaquero, que es mediadora, explica que ha tenido la oportunidad "de hablar con personas con sordoceguera que no tenían ningún tipo de sistema comunicativo".

Más información por parte de la sociedad

Por su parte, el delegado de la ONCE en la región, Carlos Javier Hernández, habla de necesidades, como la asistencia en una comunidad como Castilla-La Mancha. "Estamos hablando de una comunidad muy grande; nosotros apostamos por que la rehabilitación y la inclusión sea en el barrio y en el municipio".

José Ignacio pide más conocimiento social. Un ejemplo es el bastón rojo y blanco que llevan, que indica que es una persona con sordoceguera: "Si te ven con un bastón blanco y rojo, lo que suelen pensar es que eres ciego o que eres afiliado al Atleti", bromea Antoranz, que apunta a que "es muy poco conocido que tengas una discapacidad añadida".

Por el Día Internacional de las Personas con Sordoceguera, que se celebra el 27 de junio, la ONCE ha creado un cupón que ya se puede comprar.