Sociedad

La empresa de biometano que se podría instalar en Montearagón creará 14 puestos directos y explica que es una planta de economía circular

El gerente de operaciones ha explicado a SER Talavera que este proyecto lleva tres años forjándose y ha desmentido "bulos", además ha asegurado que respeta todas las alegaciones porque así salen proyectos más serios y rigurosos

Talavera de la Reina

La empresa Five Bioenergy no ha querido pasar por alto las últimas informaciones que se están dando sobre la posible implantación de una planta de biometano en la localidad de Montearagón. Informaciones que han dado voz a medio centenar de vecinos y vecinas que ya han anunciado que presentarán alegaciones conjuntas antes del 31 de julio para frenar la instalación de esta planta de biometanización y biofertilizante que podría construirse a 400 metros del río Tajo y a 1,5 kilómetros del núcleo urbano.

Estos vecinos aseguran que la repercusión de esta empresa en el pueblo sería muy fuerte con"filtraciones al río, malos olores, contaminación del aire, modificación de flora y fauna, enfermedades pulmonares o daños cerebrales".

Más información

"Siempre hemos estado abiertos a divulgar, explicar e informar sobre el proyecto"

Por todo esto, esta emisora ha contactado con Alberto Pérez, gerente de operaciones de la empresa Five Energy. Pérez ha asegurado que en las recientes informaciones "se mezclan tipos de procesos y proyectos y a veces esa desinformación genera un miedo que no es necesario, porque nosotros al menos siempre hemos estado abiertos a divulgar, explicar e informar sobre el proyecto".

Pérez ha expresado que el proyecto de Montearagón lleva trabajándose desde hace casi tres años y además "viene como una solución a la ganadería" ayudando a la economía circular. Además, asegura que han hablado con el alcalde y con todas las administraciones "por responsabilidad" y ha explicado que la administración pública no decide si se lleva a cabo el proyecto o no "lo que evalúa es si cumplimos con los requisitos".

14 puestos directos en Montearagón

Alberto Pérez ha explicado que una de las obligaciones que tiene el proyecto es beneficiar directamente a la localidad con impuestos y empleos directos, "nosotros no queremos que gestione nuestra empresa la bolsa de empleo, será la diputación o el ayuntamiento". El gerente habla de unos 14 o 16 puestos directos más los indirectos relacionados con "el sector logístico, la fundación que irá con su laboratorio de investigación y el desarrollo de medio ambiente o la agricultura regenerativa", entre otros, también impuestos anuales "es un impacto considerable para Montearagón".

Entienden, valoran y respeta los miedos de los vecinos

El gerente de operaciones ha querido transmitir al municipio comprensión, dice que respetan, entienden y valoran los miedos e incertidumbres que puedan tener los vecinos "que el Ayuntamiento los recoja, así como los riesgos y los registren mediante alegaciones". Es normal, explica, que los ciudadanos presenten alegaciones "es positivo porque la exigencia de este tipo de proyectos debe ser alta", asume que estos proyectos deben regularse bien y tienen que estar mirados con lupa, "son las reglas del juego, son buenas y sanas".

¿Por qué instalarse en Montearagón?

A la pregunta de por qué instalarse en esta localidad, Pérez ha explicado que la foto actual de la realidad en ciertos núcleos donde la industria ganadera y agrícola es muy fuerte - como la de esta zona - es que "están generando muchos residuos orgánicos que cuando se descomponen ya están liberando esos gases que dicen que contaminan, es decir, a fecha de hoy, ya estamos contaminando con todo ese metano y gases, y en el suelo con componente y sales, el impacto es muy alto".

A partir de aquí, el proyecto de la empresa siempre se ha centrado en regiones donde lo anterior es un problema y entonces "intentamos llevar a cabo una gestión sostenible de estos residuos orgánicos no peligrosos que cuando se descomponen generan gases que son los que atrapamos con cúpulas selladas y después pasamos a un proceso de depuración de limpieza, obteniendo un metano que se inyecta en la red gasística nacional".

Además, queda un subproducto que al haber estado degradado por las bacterias y organismos vivos queda un componente que la empresa lo transforma en un fertilizante regenerativo "no solo no contamina a la agricultura, sino que además es capaz de regenerar materia orgánica y nutrientes del suelo".

En tres meses podrían tener la licencia ambiental

La pregunta ahora es cuándo será una realidad, Pérez ha comunicado que si todo fuera normal, en tres meses podrían tener la licencia ambiental y a partir de ahí vendría la licencia de obra y con ello, el arraque de las obras "parece que es poco tiempo, pero llevamos tres años trabajando esto".

De todas formas, ha explicado que esto es un proceso largo y que ahora se encuentran en información pública para que se evalúe si es un proyecto de interés prioritario "esto no quiere decir que ya podamos construir". Simplemente, expresa, significa que se cumplen con los requisitos que exige la comunidad.

Ariadna Burgos

Ejerciendo la profesión con cercanía, respeto...