Valverdejo (Cuenca) trata de volver a la normalidad tras el incendio forestal más grave de este verano en la región
El fuego comenzó el pasado 30 de julio y los vecinos esperan a la extinción definitiva para hacer balance de daños
Cuenca
Se cumple una semana del inicio del incendio de Valverdejo, el más grande sufrido hasta el momento este verano en Castilla-La Mancha, y que continúa activo a la espera de su extinción definitiva. Los pueblos afectados intentan recuperar la normalidad, y esperan a que quede definitivamente apagado para hacer un balance de daños.
Un incendio que llegó a nivel 2 de peligrosidad, que ha afectado a 2.500 hectáreas y que, entre otros aspectos, obligó a confinar en sus casas a los vecinos de dos pueblos del entorno, debido al humo. El vigilante de una torreta dio la alarma a las dos menos diez de la tarde del pasado 30 de julio, quedó controlado más de 40 horas después, en la noche del jueves y desde entonces estamos a la espera de su extinción.
La alcaldesa de Valverdejo, Vanessa Elvira, ha explicado que los vecinos están muy afectados, pero el pueblo trata de volver a la normalidad.
De momento, y hasta que no quede definitivamente extinguido, tampoco pueden transitar por la zona para conocer el alcance real de los daños, aunque ya ha avanzado que el monte público del Ayuntamiento ha sido la zona más afectada.
De momento se desconocen las causas, y con la experiencia del gran incendio de hace cinco años, Elvira cree que se demorará en el tiempo.
El fuego afectó a Valverdejo, pero también a Gabaldón, Barchín del Hoyo, Piqueras del Castillo o Las Valeras. Se inició apenas siete kilómetros al sur del fuego que calcinó 2.800 hectáreas en 2019, lo que permitió también frenar su avance.
Más de 700 efectivos y 144 medios, 25 de ellos aéreos, han participado en el dispositivo de extinción del INFOCAM, al que se sumaron en los momentos de mayor peligro las BRIF de Cuenca y Soria, varios aviones anfibios del Ministerio para la Transición Ecológica o la Unidad Militar de Emergencias (UME).