Samuel Navalón triunfa en Ciudad Real

Ciudad Real

Cierre de la Feria Taurina en honor a la Virgen del Prado con una entretenida novillada en la que destaco el triunfador Samuel Navalón y un Marco Pérez que perdió los trofeos por el mal uso del acero.

Una novillada muy interesante en la que el público disfruto con novilleros que están más que sobrados, en técnica, en valor y en entrega. Sorprendieron por su frescura, desbordante ilusión y sus ganas de triunfo, ante una novillada de Albarreal que estuvo escasita de raza, a excepción del cuarto de la tarde que tuvo algo más de calidad.

Samuel Navalón, con gran capacidad y solvencia

Abrió plaza Samuel Navalón, que tiene en el horizonte más cercano su alternativa, le falta poco menos de un mes para que esto suceda y su posterior confirmación en Las Ventas. Se le ve con una capacidad y una solvencia muy grande.

A su primero no se lo pensó dos veces y lo recibió con un arrebatado saludo capotero, con las rodillas en el albero, con templadas verónicas rematadas con una larga cambiada. Con la muleta tiro de recursos, a media altura ante un novillo con poca clase y las fuerzas justas al que le puso la emoción que le faltaba. Dominio y suavidad para conducir la embestida, destacando con la mano izquierda y con varios circulares invertidos al final de la faena. Sin distancia apenas entre taleguilla y pitones que hicieron las delicias del público. Cerró con manoletinas, para rematar con una estocada que le valió el corte de una oreja con petición de la segunda que el Palco no atendió.

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Dos orejas cortó Samuel Navalón al cuarto que brindo al torero Cesar Jiménez. Un utrero que embistió con nobleza y mejor aire. Comenzó su faena de rodillas en los medios para pasar a series templadas por ambos pitones con profundidad temple y mando. Muy ceñido siempre, con los pitones muy cerca, tanto que fue volteado en dos ocasiones sin consecuencias, levantándose de ellos apenas sin despeinarse y dando el pecho siempre. Como así hizo al entrar a matar, haciendo la suerte suprema por derecho y con rectitud. Coloco una estocada tendida de rápido efecto, que le valió el corte de dos orejas que le aseguraban la puerta grande.

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A Marco Pérez el acero le jugó una mala pasada

Marco Pérez es un novillero decidido que expone y que no se encoge, un torero en miniatura que se agiganta ante la adversidad. Variado y con imaginación con el capote toda la tarde se gustó por faroles, verónicas, navarras y serpentinas. Este novillero tiene algo que capta inmediatamente la atención del público, lástima que el acero le jugará una mala pasada y perdiera todo triunfo.

Su primer novillo no le ayudo mucho, todo lo tuvo que poner Pérez, a base de tesón y colocación. Lo recibió por estatuarios sin moverse del sitio y hubo que sacarle los muletazos, sobresaliendo varios redondos y cambios de manos que calaron fuerte en el tendido. Aguantando las paradas del novillo, mostrando facultades y esa aparente facilidad y desparpajo con el que se pone delante de los astados. Una lástima que perdiera los trofeos por el mal uso del acero y del verduguillo.

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Con el quinto de la tarde, un novillo muy alto que se quedó muy parado, sin humillar con poco viaje y que se ponía brusco en cuanto tocaba las telas. Marco Pérez, inició su faena por estatuarios y piso terrenos de mucha cercanía exponiendo mucho, muy valiente, insistente y con la intención siempre de conseguir el triunfo, ese que no logró finalmente. Su repetido fallo con el verduguillo hizo que recibiera dos avisos del Presidente. La rabia por la pérdida de trofeos, era evidente en el joven novillero y el público le pidió que diera la vuelta al ruedo, algo que finalmente hizo como premio a esa rotunda actitud.

A Cristian González no le tocó un lote muy óptimo

Cristian González, novillero salmantino vinculado taurinamente a nuestra provincia se presentó en Ciudad Real algo menos placeado que sus compañeros de terna. Con un lote que le correspondió en suerte no muy óptimo para el triunfo. A su primero, brindado a nuestro compañero en labores informativas, lo llevo largo y con profundidad en algunos pasajes, pese a que no humillaba, pero sin conseguir tener el eco suficiente en el público. Recibió palmas tras un pinchazo y una estocada tendida y trasera.

El que cerró el festejo y la feria, estuvo muy bien lidiado por el hombre de plata, Mario Campillo que lo cuidó e intentó que esa embestida llegara en las mejores condiciones a su jefe de filas, pero el novillo fue malo. Cristian González no estuvo por momentos bien colocado con él y en determinados pasajes en la periferia, recibiendo palmas por la voluntad mostrada.

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Cuarta y última del abono. Con un cuarto de entrada en la Plaza de Toros de Ciudad Real se han lidiado novillos de Albarreal de aceptable presentación y juego desigual (mejor el cuarto de la tarde) para

Samuel Navalón (de azul celeste y oro) oreja y dos orejas

Marco Pérez (de verde manzana y oro)ovación con saludos y vuelta al ruedo tras dos avisos

Cristian González (de azul marino y oro) ovación tras aviso y silencio