Hallazgo único en Ajofrín (Toledo): unos baños árabes en una vivienda particular del Siglo XIII

Toledo (Toledo)

El grupo de arqueología de Cota 667 ha realizado un hallazgo único en el centro de la Península Ibérica: los primeros baños árabes en el entorno rural. Un descubrimiento que se ha producido en una vivienda de la calla Buitragos número 2 de la localidad toledana de Ajofrín. Todo, después de que los dueños de este inmueble reformasen esta vivienda y en esos trabajos se descubrieron esos baños árabes. Unos baños, tal y como ha detallado Miguel Ángel Díaz, en declaraciones a SER Toledo, que serían de uso público, aunque de época tardía, ya que su construcción dataría del Siglo XIII, cuando este tipo de instalaciones ya estaba en decadencia y eran perseguidas por la Iglesia.

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Además, este historiador explica que estos baños se encuentran en muy buen estado de conservación, tras mantenerse intacta buena parte de la estructura original de este recinto. Unos baños que se calcula que se usasen desde el Siglo XIII y hasta el XVI. Además, se ubicaban en una zona de paso entre Toledo y Ciudad Real. Tras ello, esta provincia de Castilla-La Mancha comunicaba con Andalucía. Por este motivo, se piensa que eran unos baños bastante transitados por diferentes visitantes que cubrían esta ruta de viaje.

También, Díaz ha explicado que estas instalaciones guardan las mismas características que las de un baño árabe de aquella época, puesto que al encontrarse en un entorno rural y no urbano, no tiene que adaptarse a los condicionantes que se producen en los núcleos urbanos, como es el caso de Toledo. Un descubrimiento relevante al tratarse de un baño rural en una zona donde predominan los baños urbanos y su datación indica la pervivencia de estas estructuras en la meseta castellana en un periodo en el que comenzaban a declinar en otras regiones de la Península Ibérica.

Con todo ello, ese buen estado de conversación se debe al interés por parte de los técnicos de patrimonio, que ya en los años 90 la catalogaron como “ámbito de prevención”, preservó su integridad hasta la actualidad. Una medida que evitó su derribo en la primera década de los 2000. Un requerimiento que tenía como objetivo evitar la caída de tejas a la calle y que derivó en una intervención arqueológica que ha sacado a la luz unos baños medievales en un estado de conservación excepcional, constituyendo uno de los mejores ejemplos de baños rurales en el centro de la península.

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Una intervención arqueológica que ha logrado identificar las salas caliente y templada de los baños, construidas con un aparejo toledano típico del siglo XIII, aunque la sala fría original habría desaparecido. En esta línea, el horno que permitía calefactar las salas se localiza en el patio trasero, con estructuras bien conservadas como el hipocausto, aunque los elementos relacionados con el agua, como las pilas o bañeras, han sido expoliados.

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Por último, ahora, se espera poder poner en valor estos baños árabes únicos en este inmueble privado de la provincia de Toledo. Para ello, avanza Díaz, se realizarán nuevas campañas arqueológicas para consolidar estas instalaciones y poder explicar cómo funcionaba este espacio cuando estaba abierto al público en general.