El aroma de vainilla podría evitar los ataques de lobo al ganado
Un proyecto piloto que llega a su fase final y que está impulsado por el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Instituto de Investigación de Recursos Cinegéticos (IREC)
Sierra Norte
El olor a vainilla sería la solución para muchos ganaderos afectados por los ataques de lobo ibérico en la Sierra Norte de Guadalajara. El proyecto, que lleva un tiempo en marcha, alcanza su fase final antes de concluir a finales de año.
El último periodo del ensayo 'aversión condicionada', tiene como gran protagonista al aroma de vainilla. En un comienzo, se colocan cebos con carne sin el olor para que los lobos puedan comérselos, después, en la segunda fase, se impregnan con una sustancia que genera malestar y vómitos, de esta forma, cuando en la tercera fase los cebos contienen vainilla, los lobos comienzan a relacionar ese olor con el malestar. Un proceso que busca generar rechazo en el lobo ibérico hacia la carne del ganado.
Según informa Europa Press, los profesionales que participan en el trabajo de investigación están manejando dos manadas en la provincia de Guadalajara, una en Cantalojas y otra en el Alto Rey, donde son frecuentes los ataques de lobo. Aunque es una tarea complicada debido al continuo desplazamiento de esta especie por el territorio, los investigadores siguen ideando formas de proteger el negocio de los ganaderos, como por ejemplo, colocando collares aromatizados que ahuyenten a los lobos. Aun así, el Gobierno de Castilla-La Mancha ya ha publicado una nueva línea de ayudas para prevenir el ataque de lobos.
El lobo ibérico está incluido en el Real Decreto 139/2011 como especie protegida y está prohibida su caza deportiva, con estos proyectos se busca la coexistencia de lobos y ganadería de extensión.