Adicción al juego: Cómo se crea y la debilidad de los jóvenes

Las Pedroñeras

Según el Estudio de Prevalencia de Juego 2022-2023 elaborado por el gobierno de España, un 49,29% de las personas encuestadas ha jugado alguna, ya vez sea física o telemáticamente.

El juego puede ser considerado una adicción porque produce cambios en el cerebro que puede llevar al "enganche". Esta adicción se produce por la recompensa que puedes llegar a obtener en un periodo no determinado de tiempo.

Esther Mezcua, nuestra psicóloga en Radio Azul, explica que "las adicciones al juego se producen porque jugar a juegos de azar produce refuerzos variables intermitentes, es decir, sabes que te va a tocar algo pero no sabes en qué momento". Así, Mezcua añade que "ese comportamiento es muy adictivo, porque a nivel cerebral se estimulan muchas zonas del placer cuando recibimos una recompensa o una gratificación"

El poder adquisitivo de los jóvenes

Uno de los públicos diana de las empresas que gestionan las casas de apuestas son los jóvenes. Según el Estudio de Prevalencia de Juego, un 22% de los jugadores es menor de 25 años. Muchos de ellos esperan a cumplir los 18 años para poder acceder a los salones de juego por el misticismo que tienen estos lugares o por las recompensas que pueden obtener, ya sea una copa gratis por jugar o el beneficio económico no garantizado.

"Hay muchos chavales que con 17, 18, 19 años todavía están estudiando y tienen una paga que viene de la casa", comenta la psicóloga. Así, explica Mezcua que para la gente de esta edad "sacar 20 euros es un botín muy importante, el reforzador es inmenso".

Por eso, muchos de los jóvenes que antes de salir de fiesta, por ejemplo, apuesta en un salón de juego para ver si obtiene más dinero y poder gastar más esa noche, convierten esto en rutina, "y ahí empieza la adicción", señala Mezcua.

La terapia como salida

De estas adicciones se puede salir, cualquier conducta se puede cambiar en terapia. Aquí se buscará cuándo, con quién y por qué te vas a jugar, ya sean problemas económicos o simplemente que al beber alcohol hay más predisposición para jugar. Una vez conocidas las causas, en terapia se dan conductas alternativas que sean funcionales para estas personas con problemas.

"Sería controlar la conducta de juego, todas las variables que están implicadas, y a partir de ahí que el paciente comprenda cómo es su conducta de juego y de esa forma poder cambiar esas conductas, pensamientos, o emociones relacionadas con el juego", afirma la psicóloga.

El origen de cómo comenzó una persona en el juego "ya nos da igual, porque no podemos cambiarlo, pero sí hay que ver todas las variables que hay alrededor de esa conducta de jugar y, de esa forma, podremos identificarlo mejor y al identificarlo mejor, seremos más capaces de tener mayor autocontrol y poder cambiarlo".

Por cierto, nuestra psicóloga Esther Mezcua volverá a pasar consulta en Radio Azul a partir del jueves 3 de octubre y ya todos los jueves desde las 11:30 en Hoy por Hoy Radio Azul.