Opinión

En otoño, al cine

La firma de opinión de la periodista y presidenta de la Asociación de la Prensa de Albacete, Loli Ríos Defez

'En otoño, al cine', la firma de Loli Ríos Defez

Albacete

El otoño, en esta ciudad, lo pasamos en el cine. Lo hacemos las miles de personas que disfrutamos de Abycine, un festival que cada año trae las propuestas más originales de la industria cinematográfica de este país. Digo de la industria, pero las películas independientes que nos ofrecen son, muchas veces, productos artesanos y únicos que abren camino a sus creadores y que nos descubren nuevas historias y maneras de contarlas.

Por cierto, este año no me he podido sentar en mi lugar preferido del Capitol: fila tres, a la derecha, pegando al pasillo. Me está matando eso de las entradas por internet, alguien elige mi asiento antes que yo. También es verdad que, a cambio, me ahorro una sesión de fisio, porque siempre acabo con una contractura en el cuello. El caso es que, desde otra perspectiva, he visto pelis que recordaré siempre. He hablado con equipos técnicos y con elencos artísticos que me han enseñado su particular visión de su trabajo. Ah, entre ellos estaba un actor que, desde que lo vi interpretar al Segismundo de la Vida es sueño en el Festival de Chinchilla, se convirtió para mi en “el” actor. Grande Fernando Cayo.

Abycine me sobrecoge a mí y a quienes pasan por sus salas durante ocho días. Pero el Festival también tiene una parte profesional a la que acude, esta vez sin ninguna duda, toda la industria del cine independiente español. Unas doscientas personas, así con aspecto de muy modernas, se han estado paseando por la ciudad estos días. Han comido en sus restaurantes, han ido a sus bares, han dormido en sus hoteles, han comprado en sus comercios, y se han llevado una imagen de un Albacete del siglo XXI, que hace tiempo que se sacudió sus complejos.

Lo que no sé es cuándo se van a sacudir los suyos algunas instituciones. Si todo eso que os he contado ha estado pasando desde la semana pasada, por no hablar de los y las 20.000 estudiantes que asisten a Mi Primer Abycine, no entiendo por qué la ciudad no está empapelada, literalmente, con elementos que nos recuerden a cada paso que estamos viviendo los días más importantes del año para la cultura.

Abycine tendría que estar hasta en la sopa, para que, además de disfrutarlo, estuviéramos presumiendo de un producto que, como suele pasar, es más valorado fuera que dentro. Y no me refiero al público, que ése sí responde. Preguntádselo al director del Festival de Cine de Málaga. Tuvo que venir desde la orilla del Mediterráneo para decirle a los nuestros que se enteren de lo que tienen y pedirle más apoyos para un certamen que, o lo cuidamos, o acabará poniendo el FIN, como en los clásicos.

Hoy por Hoy Albacete (24/10/2024)