Don Quijote, del Ballet de Kiev
La firma de opinión del director de Cultural Albacete, Ricardo Beléndez
'Don Quijote, del Ballet de Kiev', la firma de Ricardo Beléndez
Albacete
Si preguntásemos a cualquier persona que nos dijese el nombre de algún ballet clásico casi todas nos dirían “El lago de los cisnes”, aunque no lo hayan visto nuca, quizás algunas “La bella durmiente” o “El Cascanueces”, ballets todos ellos del compositor ruso Chaikovski y coreografiados por el francés Marius Petipa.
Muy pocas personas nos hablarían de Don Quijote, me refiero como ballet, como novela de Don Miguel de Cervantes si nos harían referencia a ella aunque no se haya leído nada o casi nada.
Coreografías de Don Quijote ha habido bastantes pero hoy me gustaría hablar del ballet que se estreno el 26 de diciembre de 1869 en el Teatro Imperial Boshói en Moscú, Rusia y que por tanto dentro de un mes cumplirá 155 años. Ballet con música de Ludwig Minkus y libreto y coreografía de Marius Petipa, si efectivamente el mismo famoso coreógrafo del Lago de los cisnes. El ballet Don Quijote fue junto al Lago de los cisnes los dos ballets más populares de su época.
El ballet es una versión muy libre de Don Quijote y especialmente de las “bodas de Camacho” centrándose en los amores de Quiteria y Basilio. Bodas que según la tradición se celebraron en Múnera, provincia de Albacete, aunque en el ballet la historia tiene lugar en el puerto de Barcelona.
Don Quijote tiene una gran importancia porque a pesar de que es de compositor austríaco, de coreógrafo francés y creado en Rusia es el ballet clásico que más piezas de danza española reúne. Danzas como el bolero, la seguidilla, fandangos, bailes gitanos, jotas...
El por qué de tanta danza española en ese ballet tiene sus razones. En 1843, Petipa recibe una oferta para ocupar el puesto de primer bailarín en el Teatro Circo de Madrid. Durante los tres años siguientes adquiere un profundo conocimiento de la danza tradicional española y se enamora de ella pero no solo esos fueron sus amores. En 1846, inicia una relación con la esposa del marqués de Chateaubriand, miembro de la embajada francesa en España. Al enterarse del romance el marqués retó a Petipa a un duelo. Petipa no acudió a esa cita con la muerte y abandonó de forma rápida España para no volver jamás, aunque si se llevo su amor por la cultura y la danza española con él.
Volvamos a Don Quijote, ballet maravilloso, muy colorista, divertido, con grandes dificultades para los bailarines y bailarinas y en el que de forma muy libre tienen presencia personajes como Don Quijote, Dulcinea, Sancho Panza, Quiteria, Basilio, Camacho, pero además toreros, gitanos, pescadores y hasta un grupo de ninfas con el dios del amor, Cupido, y también escenas memorables como la lucha de Don Quijote contra los molinos de viento.
El ballet, si no me equivoco, solo ha sido representado dos veces en Albacete y en ambas ocasiones dentro de las celebraciones del IV centenario de Don Quijote, en 2005 y en 2015. Ahora tenemos la posibilidad de verlo mañana, 30 de octubre, en el Teatro Circo de Albacete en la interpretación que realizará el Ballet de Kiev, Ucrania. Una oportunidad casi única porque la otra función, que la compañía realizará en su gira, será en Madrid.
Un último dato. La Compañía Nacional de Danza hizo su montaje de Don Quijote estrenándose en Madrid el 16 de diciembre de 2015 y si se preguntan por qué hago referencia a esto es porque el personaje Espada fue interpretado por uno de nuestros grandes bailarines el albaceteño Esteban Berlanga.
Esperamos disfrutar mañana con esta joya de la danza clásica.
Ricardo Beléndez
Desde 2015, director gerente de Cultural Albacete...