¿Cuáles son los accidentes laborales más frecuentes entre las trabajadoras?

Toledo

CCOO Castilla La Mancha ha realizado el primer estudio de la siniestralidad laboral desde una perspectiva de género. En él se incluyen los riesgos, desigualdades y retos en la prevención. Los datos analizados abarcan los años 2021 hasta el 2024. Entre las principales conclusiones están que muchos entornos laborales siguen diseñados bajo estándares masculinos sin considerar diferencias fisiológicas o que en sectores con alta presencia femenina (sanidad, limpieza, cuidados) las exigencias físicas como posturas forzadas o sobrecargas musculares pueden ser más perjudiciales para la mujer.

Si bien los datos reflejan una mayor incidencia de accidentes entre los hombres, el 72% del total, las mujeres sufren riesgos laborales que a veces quedan invisibilizados. Los sectores feminizados como la sanidad, la limpieza o el comercio han contribuido a que lesiones musculoesqueléticas, estrés laboral o exposición a agentes biológicos no sean considerados con la misma relevancia que otros accidentes más evidentes. Las causas más comunes de accidentes por sobreesfuerzos son: el levantamiento de objetos pesados, movimientos repetitivos, posturas inadecuadas, falta de pausas o trabajo en ambientes inadecuados. Las consecuencias pueden ser variadas con especial incidencia de inflamación, lesión articular, desgarros, hernias discales o lesiones incapacitantes.

El pasado año 49 hombres fallecieron en su jornada de trabajo frente a una mujer (debido a un infarto) Reespecto a los accidentes graves, ellos sufrieron 159 frente a 31 de ellas. En los leves, los hombre sufrieron el triple de accidentes, 18.654, frente a los 6.624 de las mujeres.

Por ramas de actividad, el mayor número de accidentes en 2024 se produjeron en la administración pública seguida de establecimientos residenciales, servicios de comidas, comercio al por menor, industria de la alimentación o actividades sanitarias. También influye la precariedad laboral o la falta de medidas de seguridad adaptadas a las necesidades de las trabajadoras. La ocupación donde más accidentes sufren las mujeres es la de peonas de las industrias manufactureras con 608 accidentes en jornada de trabajo. Después vendría el de personal de limpieza de oficinas y hoteles con funciones como barrer y limpiar, hacer camas o recoger basura. Éstas acaban generando trastornos musculoesqueléticos como lesiones en muñecas, hombros, espalda o rodillas. La tercera ocupación con más accidentes es la de auxiliares de enfermería que, a las condiciones de sobrecarga muscular, añaden la del estrés y falta de pausas adecuadas.

En cuanto a los accidentes in itinere, en los 4 años analizados se comprueba como ellas sufren un mayor número aunque nada tenga que ver con los sufridos al volante. El motivo es que las mujeres usan medios de transporte "mas vulnerables" como caminar o el transporte público lo que hace que estén más expuestas a golpes o caídas. Influye en este sentido que ellas se sienten más sobrecargadas por la carga doméstica, la prisa y el estrés.

Respecto a las enfermedades profesionales, se han detectado diferencias en la forma en la que se diagnostican y registran según el sexo lo que podría reflejar sesgos en la prevención, reconocimiento y notificación de las mismas. La industria manufacturera y el comercio son los sectores donde más se cuantificaron el pasado año.