"Los musulmanes vivimos en armonía en Alcázar"

Alcázar de San Juan

Acaba el mes de marzo, y los musulmanes han puesto el broche final a unos días muy destacados en su calendario, con la fiesta de fin de ramadán, el Aid al-Fitr. Para conocer más sobre estos ritos, en 'Hoy por Hoy' hemos charlado con Mohammed, que forma parte de la comunidad musulmana alcazareña.

Una celebración religiosa que va más allá de simplemente ayunar: durante los 30 días que dura el ramadán, los musulmanes no pueden, por ejemplo, decir palabras malsonantes, y deben mostrar una actitud de gratitud y perdón.

Mohammed asegura que vivir el ramadán en un país como España es "el doble de complicado" que en un sitio árabe, porque no pueden adaptar sus jornadas de trabajo, y están expuestos a comida y bebida constantemente. Las lluvias de estas últimas semanas han facilitado la labor de mantener la abstinencia: "Con las temperaturas que tiene La Mancha, un ramadán en verano es insufrible", afirma.

Una abstinencia de comida y bebida que se extiende todo lo que dura la luz del día, y que debe compaginarse con sus labores diarias como ir a trabajar. "Se hace duro cuando tu compañero saca el bocadillo y la botella de agua", ha contado entre risas.

Mohammed, atleta profesional, lleva 17 años viviendo en Alcázar, y aunque la convivencia es excelente en la mayoría de ocasiones, se ha encontrado con casos de racismo, como por ejemplo, arañazos en su coche. "Son personas llenas de odio, que nunca han salido de sus pueblos y no han explorado otras culturas", relata.

El ramadán tiene personas exentas, como las mujeres embarazadas, los diabéticos o quienes tengan que hacer un viaje largo. "El ramadán no es ningún castigo", cuenta. "Lo hacemos de forma voluntaria, Dios no quiere que ninguna persona enferme", añade.

Fiesta de fin de ramadán en Alcázar

Este domingo, unos 260 musulmanes se reunieron en el patio del colegio Jesús Ruiz para celebrar el regreso al ayuno, practicaron los rezos y terminaron con una merienda. Al evento acudieron los concejales del Ayuntamiento de Alcázar, Patricia Benito y Gonzalo Redondo.