Domingo de penitencia: El Albacete Balompié paga dos malos minutos y la permanencia tendrá que esperar

Albacete

Domingo de Ramos en el Carlos Belmonte de Albacete con más de 10.000 aficionados y cerca de 1.000 visitantes procedentes de Granada. Kofane y Javi Martón estrenaban dupla en la delantera y el Albacete empezaba buen, mandando y acumulando las primeras llegadas a la portería de Mariño.

Los avisos y las mejores ocasiones eran para los locales, Kofane en el 20 con un cabezazo que se marchaba al lateral de la red y Riki en el 36 con otro testarazo que hacía trabajar a Mariño con una buena parada. El Granada se estiraba a la contra, algún destello de Gonzalo Villar, pero sin poder encontrar a Lucas Boyé en situaciones de gol. Con 0-0 se iban los jugadores a vestuarios y era el momento de abrir los bocadillos en la grada.

En la segunda mitad el Albacete metió, no una, sino dos marchas más. La intensidad de los locales era plausible, el Granada achicaba aguas y a los de Alberto González, que estrenaba paternidad desde el banquillo, tan solo le estaba faltando gol. Un gol que llegaría en el ecuador de la segunda mitad, pero en la portería contraria. Una jugada desafortunada dentro del área terminaba con Pepe Sánchez enviando un rechace a su propia portería y batiendo a Raúl Lizoain. 0-1 y tres puntos momentáneos para un Granada que estaba cuajando un partido muy serio.

Le sentó muy mal el gol al Albacete, que apenas sacó de centro, perdió el balón y se lo cedió a placer para que Lucas Boyé asistiera a Hongla, y este batiera por bajo a Raúl Lizoain de nuevo poniendo el 0-2 en el marcador. Aquí se acabó el encuentro, el conjunto albaceteño se quedó k.o y el Granada se dedicó a conservar una distancia que era oro para ellos.

0-2 y tres puntos para un Granada que asalta posiciones de playoff, mientras que el Albacete se queda con 47 puntos. La permanencia matemática tendrá que esperar, mientras que las opciones de playoff se desvanecen.