Puertas del Sol de Tarancón: una restauración con hallazgos históricos
Los trabajos avanzan a buen ritmo y se espera que las puertas estén instaladas de nuevo en la iglesia de la Asunción antes del 15 de agosto
Puertas del Sol de Tarancón: una restauración con hallazgos históricos
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Cuenca
Los trabajos de restauración de las llamadas Puertas del Sol de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Tarancón avanzan con buen ritmo y prevén su finalización antes del 15 de agosto. Esta intervención, financiada con 25.000 euros por la Diputación de Cuenca y con apoyo del Ayuntamiento de Tarancón, se suma a la línea de rehabilitaciones patrimoniales iniciada con las Puertas del Cierzo en 2022. Más allá de la mejora estética y estructural, la actuación ha permitido redescubrir fragmentos olvidados de la historia local.
Félix Montoya, profesor de Historia y coordinador del grupo de patrimonio de la parroquia, ha explicado que, aunque se trate de un elemento “menor en términos artísticos, estas puertas tienen un enorme valor histórico”. “Son unas puertas que datan de 1654, lo sabemos con exactitud gracias a un documento que se encontró en su interior en la restauración de 1954. En él se detallaban tanto el autor como las circunstancias del montaje. Es de los pocos elementos del templo que podemos fechar con tanta precisión, ya que el archivo parroquial original se perdió en la Guerra Civil”, comenta Montoya.
Durante los actuales trabajos, también ha aparecido un nuevo testimonio del pasado: “La semana pasada, al desmontar los postigos, encontramos un cartucho de cartón con otro documento dentro, que detallaba la restauración de hace 70 años. No aporta datos nuevos, pero refleja la voluntad de dejar constancia para el futuro. Ahora nosotros tendremos que hacer lo mismo”, señala.
Puertas del Sol de la iglesia de la Asunción de Tarancón (Cuenca).
Puertas del Sol de la iglesia de la Asunción de Tarancón (Cuenca).
Curiosidades arquitectónicas
Las puertas, de gran tamaño y orientadas al sur, fueron tapiadas antes de 1886, probablemente por su cercanía al antiguo cementerio parroquial. “Su uso original era muy específico: se utilizaban para la salida de los féretros hacia el cementerio, y al trasladarse éste a las afueras, la puerta perdió su funcionalidad y se selló”, indica Montoya.
Durante el desmontaje actual, se han observado curiosidades arquitectónicas, como la sustitución de los quicios originales de piedra por otros de ladrillo, probablemente realizada en 1954 tras los daños que sufrió la iglesia por la explosión del polvorín cinco años antes. “Fue entonces cuando se restauraron por primera vez, coincidiendo curiosamente con su tricentenario”, apunta el historiador.
Iglesia de la Asunción, en Tarancón (Cuenca). / turismocastillalamancha.es
Iglesia de la Asunción, en Tarancón (Cuenca). / turismocastillalamancha.es
En cuanto al estado de conservación, la intervención actual ha sido más compleja que la realizada en las Puertas del Cierzo. “Estas estaban mucho más deterioradas. La madera, aunque de gran calidad, estaba extremadamente seca tras 70 años sin mantenimiento, expuesta al sol del sur. No hablamos tanto de una restauración artística como de una nutrición a fondo de la madera, aplicando aceites especiales en posición horizontal para que penetren bien”, explica Montoya.
Documento que testifica las obras de restauración en las Puertas del Sol de la iglesia de Tarancón en 1954.
Documento que testifica las obras de restauración en las Puertas del Sol de la iglesia de Tarancón en 1954.
Aperturas puntuales
Una vez rehabilitadas, las puertas se abrirán de nuevo, al menos de forma ocasional. “Queremos que puedan usarse para ventilar el templo o para facilitar la salida del público en celebraciones multitudinarias como las novenas de la Virgen de Riánsares. La puerta se había cegado en 1993 con listones de madera para evitar la entrada de polvo y animales, pero ahora se le va a dar una nueva vida”, afirma el coordinador de patrimonio.
Además de las puertas, también se intervendrá en la cancela de hierro que las acompaña, afectada por pequeñas deformaciones. Y mirando al futuro, Montoya tiene nuevos objetivos. “Me gustaría poder intervenir en la balaustrada de la torre, que ha soltado algún cascote, y hacer una cata en la cúpula de la capilla de San Antón. Sospecho que allí debajo puede haber restos de frescos ocultos”, añade.
La historia de las Puertas del Sol sigue viva. De ser el paso solemne hacia el antiguo camposanto a convertirse en archivo de memorias ocultas en sus cuarterones, su restauración no solo preserva el patrimonio, sino que también lo hace hablar. Como recuerda Montoya: “Estas puertas tienen su historia. Y ahora nos toca a nosotros dejar testimonio para quienes vengan dentro de otros 70 o 300 años”.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy Cuenca. Periodista y locutor conquense que ha desarrollado...
