Castilla-La Mancha prevé aprobar este año la ley de tiempos máximos en Sanidad: 180 días para cirugía, 60 días para consultas y 30 días para pruebas
En caso de que estos tiempos no se cumplan, el paciente tendrá derecho a reclamar una alternativa asistencial, que podrá consistir en el traslado a otro hospital público o bien a un centro privado
Castilla-La Mancha prevé aprobar este año la ley de tiempos máximos en su sistema de salud: 180 días para cirugía, 60 días para consultas y 30 días para pruebas / Europa Press News
El Gobierno de Castilla-La Mancha avanza en la tramitación de la nueva ley de tiempos máximos en la atención sanitaria, una normativa que busca garantizar que todos los ciudadanos reciban atención médica en plazos razonables. Según ha adelantado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, el objetivo es que esta ley quede aprobada antes de que finalice el año 2025, una vez supere los trámites pertinentes.
Actualmente, el texto se encuentra en la fase de revisión jurídica, y se prevé que pueda ser aprobado en Consejo de Gobierno en los próximos meses para su posterior tramitación en las Cortes regionales. Esta normativa permitirá blindar por ley unos tiempos de espera máximos, fijando límites concretos y estandarizados en línea con los del Sistema Nacional de Salud.
Plazos máximos: 180 días para cirugía, 60 días para consultas, 30 días para pruebas
De acuerdo con el borrador de la ley, los tiempos máximos quedarían establecidos en 180 días para ser intervenido quirúrgicamente, 60 días para acceder a una consulta con un especialista y 30 días para la realización de una prueba diagnóstica.
En caso de que estos tiempos no se cumplan, el paciente tendrá derecho a reclamar una alternativa asistencial, que podrá consistir en el traslado a otro hospital público o bien a un centro privado. En ambos casos, será el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) quien asuma los costes del tratamiento, sin que suponga un gasto adicional para el paciente.
Esta medida busca agilizar el acceso al sistema sanitario y evitar los retrasos prolongados que, en muchos casos, generan un deterioro en la calidad de vida del paciente o empeoran su diagnóstico. Además, la ley pretende aumentar la transparencia y la equidad en la gestión de las listas de espera.
Organización del sistema en verano: plan de continuidad asistencial
Por otro lado, Fernández Sanz también ha abordado el plan de continuidad asistencial para el periodo estival, una época en la que tradicionalmente se incrementa la presión sobre el sistema debido al periodo vacacional del personal sanitario.
El consejero ha asegurado que el modelo de organización sanitaria se mantiene activo durante todo el año, y que se han tomado las medidas necesarias para garantizar la cobertura de los servicios durante el verano. Según ha explicado, este asunto ha sido coordinado con las gerencias de todas las áreas sanitarias de la región, y ya se trabaja en el relevo y sustitución del personal que se ausentará por vacaciones.