Fran Zapatero, pregonero de las fiestas de Tarancón: “Echo de menos los galopeos”
Este biólogo que actualmente investiga en EEUU será el encargado de anunciar las fiestas taranconeras de este verano
Fran Zapatero, pregonero de las fiestas de Tarancón: “Echo de menos los galopeos”
Cuenca
El próximo 30 de agosto, sábado, en el Centro Escénico San Isidro de Tarancón, Francisco José Zapatero Belinchón será el encargado de dar el pregón de inicio de las fiestas. Es biólogo, doctor en virología, actualmente reside en San Francisco, California, en Estados Unidos, pero no olvida tu Tarancón natal.
Lo primero, ¿cómo recibiste la noticia de que serías el pregonero de las fiestas de tu pueblo?
Pues la verdad, sorprendido. No me lo esperaba para nada. Fue una alegría muy grande.
¿Y tu familia qué dice?
Encantada, claro. Muy contentos de que me hayan elegido y también muy felices de que vaya para allá para las fiestas.
¿Qué significa para ti volver a Tarancón en esas fechas y además con ese papel tan simbólico?
Significa mucho. Llevo muchos años sin poder ir, por trabajo y otros motivos, y este año no solo voy como taranconero, sino como pregonero. Es muy especial para mí.
El alcalde de Tarancón, José Manuel López Carrizo (izq.), presenta al pregonero de las fiestas de este 2025, Fran Zapatero, en conexión desde San Francisco, California (EEUU), junto al concejal de Festejos, Juan Castejón.
¿No habrá tenido algo que ver tu familia insistiendo al Ayuntamiento para que te nombraran pregonero y así vinieras a España?
[Ríe] Puede que un poquito. A ver si así conseguían que fuera al pueblo. Mis padres fueron representantes de la tercera edad en 2018, creo, y tienen buena relación con el alcalde y la concejalía. Puede que mi nombre haya salido alguna vez en esas conversaciones.
Creciste en la avenida Pablo Iglesias, estudiaste en el colegio Gloria Fuertes y en el instituto La Hontanilla. ¿Qué recuerdas de esa etapa formativa en tu pueblo?
Tuve una infancia muy sencilla: ir al colegio, a la biblioteca, donde leía mucho, y jugar al baloncesto. El baloncesto fue muy importante para mí porque me ayudó a abrirme socialmente y a conocer a muchos amigos.
Llegaste a jugar en el Club Baloncesto Tarancón.
Sí, aunque no a nivel profesional. Lo importante para mí era hacer deporte, conocer gente y ser más sociable, porque hasta entonces me costaba un poco.
¿Cuándo supiste que querías dedicarte a la biología y la investigación?
De pequeño quería ser astronauta, luego arqueólogo, después médico… pero nunca quise trabajar directamente con personas como pacientes. La biología siempre me pareció interesante y lógica, y me fascinaba cómo algo tan pequeño como un virus puede causar tanto daño o beneficio. De hecho, la mayoría de los virus son beneficiosos para el ecosistema. Esa curiosidad fue lo que me llevó a este campo.
Estudiaste en la Universidad de Salamanca, hiciste un máster en enfermedades infecciosas y el doctorado en Alemania. También has tenido experiencias internacionales como en Islandia. ¿Qué te aportó formarte en distintos países?
Muchísimo. Siempre he tenido el deseo de conocer el mundo y ver otras perspectivas. Estar de Erasmus en Islandia fue mi primera experiencia larga en el extranjero y lo describo como la droga más sana, aunque también la más cara, porque una vez lo haces, quieres repetir. No solo me formé profesionalmente, sino que crecí mucho a nivel personal.
Has trabajado en investigación sobre VIH, covid y enfermedades emergentes. ¿En qué estás centrado ahora?
Ahora trabajamos en tres líneas: VIH, covid y enfermedades emergentes. En la parte de VIH, estamos desarrollando una terapia epigenética. A diferencia de la terapia genética, que cambia los genes, la epigenética modifica elementos que regulan la expresión de esos genes, sin alterar el ADN. Nuestro objetivo es silenciar el virus para que, incluso si el paciente deja la medicación diaria, el VIH no pueda “despertar” ni transmitirse. En otras palabras, dormirlo para siempre.
Desde tu perspectiva científica, ¿cómo ves la evolución de la salud global tras la pandemia del covid?
Estamos mejor en el sentido de que ahora somos más conscientes de la interconexión global: un virus que surge en un país puede llegar a otro en cuestión de meses. Pero también estamos peor porque politizamos demasiado las crisis sanitarias. La parte positiva es que se empieza a entender la necesidad de un enfoque de “salud única” o “salud mundial”: no sirve que un país invierta en investigación si el resto no lo hace.
Hablemos de Tarancón. He oído que echas de menos las gachas y el morteruelo. ¿Qué tradición o momento festivo añoras más?
Sin duda, el galopeo. Soy galopeo 100%. Y, por supuesto, las gachas, aunque algunos años no he podido hacerlas por logística.
¿Existen todos los ingredientes en San Francisco para hacer gachas?
No. La única vez que pude hacerlas allí fue porque llevé los ingredientes desde aquí.
¿Qué te gustaría transmitir a tus paisanos en el pregón?
Aún lo estoy pensando, pero quiero que el mensaje sea que persigan sus sueños, sean cuales sean.
Para los jóvenes de Tarancón y de la provincia que sueñan con abrirse camino en la ciencia, la investigación o simplemente fuera de casa, ¿qué consejo les darías?
Que no hay un único camino para llegar a sus objetivos. Habrá rechazos y malos momentos, pero lo importante es levantarse y seguir adelante.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy...Director y presentador del programa Hoy por Hoy Cuenca. Periodista y locutor conquense que ha desarrollado su carrera profesional en la SER