Quejas de los usuarios del autobús urbano de Cuenca por el nuevo sistema con trasbordos

Cuenca

Segunda jornada de funcionamiento del nuevo servicio de autobuses de Cuenca. Se están cumpliendo los pronósticos del equipo de gobierno, que ya advirtió de que costaría a los usuarios acostumbrarse, porque cambia la configuración de las líneas y todas pasan por el intercambiador.

Entre las quejas de los usuarios recogidas por esta emisora, son mayoritarias las relacionadas con la obligación de hacer trasbordo. También hay quienes protestan por las incidencias del primer día y solicitudes para mejorar las instalaciones del propio intercambiador.

Otros viajeros en cambio manifiestan que han salido ganando con los cambios y celebran este nuevo mapa de transporte.

En el intercambiador y el interior de los autobuses están ya los informadores del Grupo Cinco que el Ayuntamiento ha contratado para acompañar a los usuarios en los primeros días.

El PP dice que el sistema es un caos

El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Cuenca ha denunciado que el nuevo transporte público es un caos que multiplica los problemas de movilidad en la ciudad.

La presidenta del Grupo, Bea Jiménez, critica que lejos de mejorar el servicio, el resultado es un cúmulo de fallos y desorganización que perjudican a los usuarios. Enumera que las paradas están mal señalizadas, con referencias a líneas que ni siquiera pasan por ellas; no existe señalización horizontal en la calzada lo que genera confusión en el tráfico; la aplicación móvil está inoperativa y no ofrece información a tiempo real; además asegura que la obligación de pasar por el intercambiador incrementa de manera considerable los tiempos de viaje

Jiménez lamenta que se anunció un dispositivo de informadores para explicar el nuevo sistema, pero la realidad es que la gente está perdida, los conductores desbordados y lo que se escucha en la calle son solo quejas y enfados.

Los populares recuerdan que ya pidieron en su día que no se prorrogase este contrato con la empresa adjudicataria y que se iniciase una licitación nueva, y así se aprobó en el pleno con mayoría. Sin embargo lo que se ha hecho es un contrato prorrogado hasta 2027, una modificación de líneas y un servicio peor que el que había.

Cuenca en Marcha pide rectificar

Críticas que coinciden con las de Cuenca en Marcha. La formación denuncia que los nuevos transbordos en el intercambiador alargan los trayectos hasta más de una hora y que la aplicación móvil sigue sin funcionar correctamente. Califican también de “auténtico caos” la puesta en marcha de este servicio.

Denuncia que este modelo no tiene sentido en una ciudad como Cuenca, donde la mayoría de la gente utiliza el autobús para trayectos largos, no para moverse dentro de su mismo barrio.

El concejal Pablo García ha criticado que el sistema no responde a las necesidades reales de los conquenses y pide al equipo de Gobierno que rectifique.

A las demoras se suma el mal funcionamiento de la aplicación móvil, que según denuncia esta formación muestra información de las antiguas líneas, ofrece tiempos de espera que no se corresponden con la realidad y genera errores constantes, aumentando la incertidumbre y el malestar entre la ciudadanía.