Eduardo Beltrán: El científico que une Múnich y Motilla para traer la IA a la investigación de Cuenca
El pregonero de las fiestas de Motilla del Palancar, científico de éxito en Múnich, vuelve a sus raíces para impulsar proyectos de investigación en Cuenca.

Entrevista con Eduardo Beltrán, científico motillano
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La historia de Eduardo Beltrán es la de un motillano que ha demostrado que nacer en un pueblo no tiene por qué ser un límite. Reconocido científico en Múnich, ha sido el pregonero de las fiestas patronales de su pueblo, una experiencia que lo ha reconectado con sus raíces y le ha dado un nuevo propósito.
Durante su pregón, Beltrán no habló de ciencia, sino de sus sentimientos, de su infancia y de lo que significa ser de Motilla del Palancar. Para él, lo más bonito del proceso ha sido la preparación del discurso, que le permitió revivir recuerdos entrañables junto a su familia y amigos. Recordó los veranos en el campo con su abuelo y las tardes de juego con sus vecinos, experiencias que, según él, lo ayudaron a forjar su carácter y a convertirse en una persona fuerte y trabajadora.
Más allá del ámbito personal, su rol como pregonero ha abierto una nueva puerta para su carrera profesional. Beltrán ha manifestado su deseo de regresar a España y de traer a su tierra natal las tecnologías de vanguardia que desarrolla en Alemania. Su objetivo es que Cuenca y Castilla-La Mancha se beneficien de las herramientas de inteligencia artificial para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades como el cáncer, y que la región se integre en proyectos de investigación a nivel mundial.
Con su regreso, Eduardo Beltrán no solo cumple un sueño personal, sino que también ofrece a su comunidad un regalo invaluable: la oportunidad de un futuro más conectado con la ciencia y la innovación, sin dejar de lado la riqueza de sus raíces. Su historia es una demostración de que, aunque el mundo sea muy grande, es posible volver a casa y recordar de dónde venimos.




