Motilla del Palancar sale a la calle en contra del ERE de Mahle

Motilla del Palancar ha vivido este sábado una de las movilizaciones más multitudinarias de su historia reciente. Según sindicatos, cerca de 2.500 personas —entre vecinos, vecinas y trabajadores de Mahle— han recorrido las calles del municipio motillano para rechazar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado por la compañía alemana, que afectará a 550 empleados. Una cifra que convierte este proceso en el mayor despido colectivo en la provincia de Cuenca.

La protesta, convocada por CCOO y UGT, ha arrancado tras una asamblea informativa celebrada en el espacio multiusos, donde más de setecientos trabajadores conocieron el calendario de negociación abierto hasta el próximo 30 de octubre.

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“Esto es solo el inicio”

La presidenta del comité de empresa, Claudia Navarro, ha sido clara ante los medios “esta protesta es solo el inicio de una serie de movilizaciones si no hay avances”. Los sindicatos denuncian un impacto social y económico devastador y acusan a Mahle de “abandonar a toda una comarca”.

En declaraciones a SER Motilla, Amparo Mansilla, coordinadora de UGT y trabajadora de Mahle con 40 años de experiencia, ha subrayado la dimensión del problema, indicando que “esto ya no va solo de los puestos de trabajo, que es muy duro. Lo que más nos asusta es que un pueblo entero se va a ver recortado. Queremos que se vea que somos muy fuertes y que vamos a luchar por nuestra situación laboral, pero también por nuestra comarca”.

Voces desde dentro: la plantilla y sus familias

El malestar se refleja no solo en los sindicatos, sino también en los testimonios directos de trabajadores y familiares.

Una trabajadora de 42 años, que prefiere no dar su nombre, reconoce la incertidumbre, “no sé si estaré entre las despedidas. Lo que está claro es que la gestión ha sido pésima desde que Mahle asumió el control. Si me echan, tendré que reciclarme, estudiar y buscar otra salida. No queda otra”.

El impacto alcanza a familias enteras. Un vecino, padre de varios empleados de la planta, lo resumía señalando que “tengo dos hijos, un yerno, mi hermana y primos trabajando allí. Los van a hacer polvo. La empresa se ha dedicado a especular con subvenciones y meter gente sin control, en lugar de mantener lo que había. Y ahora es muy fácil llegar y tirar a cientos de familias a la calle”.

Apoyo unánime de la comarca

El clamor ciudadano se ha extendido más allá de Motilla. Johanna León, alcaldesa de Villanueva de la Jara, ha querido mostrar su respaldo y ha remarcado que “muchísimos vecinos de nuestro pueblo trabajan en Mahle desde hace años. Estamos muy preocupados, pero hoy lo mínimo es estar aquí, apoyarles y que sepan que no están solos”.

Vecinos de localidades cercanas también se han unido a la marcha. Una trabajadora procedente de Villamayor de Santiago ha relatado a Cadena SER la incertidumbre que atraviesa la plantilla y ha asegurado que “yo llevo solo cuatro años en la empresa, pero cada día ves cómo se tambalea todo. No sé si seré de las afectadas. Económicamente soy más ‘barata’ que alguien con 25 años de antigüedad, pero al final aquí nadie sabe quién se va a ir a la calle”.

La voz de los sindicatos

Durante la manifestación, los líderes provinciales de CCOO y UGT insistieron en la gravedad del anuncio.

Carlos Hortelano, secretario provincial de CCOO Cuenca, ha denunciado que el despido de 550 empleados supondría “un 6% de la tasa de desempleo en la provincia, un impacto devastador”.

Por su parte, Jesús Laín, secretario de UGT FICA Cuenca, ha recordado que “hay familias enteras que llevan toda una vida en esta empresa, a la que se le abrió la puerta para crear empleo y que ahora no está a la altura”.

Los sindicatos reclaman que se exploren alternativas industriales y critican que, mientras se plantea el ERE, “empresas subcontratadas están ofreciendo contratos precarios a través de ETTs”.

La respuesta institucional

El Gobierno central y la Junta de Castilla-La Mancha aseguran mantener contactos con Mahle para buscar alternativas de reindustrialización. El ministro de Industria, Jordi Hereu, ha calificado la situación de “inaceptable”, mientras que la consejera de Economía, Patricia Franco, aseguró que el objetivo es “salvaguardar la actividad industrial en la zona”.

Un calendario decisivo

El comité negociador, formado por representantes de las plantas de Motilla del Palancar y Paterna (Valencia), dispone ahora de un periodo de consultas de 30 días para analizar las causas del despido colectivo.

La plantilla advierte que, si la empresa no reconsidera su postura, las movilizaciones continuarán. El mensaje que este sábado ha inundado las calles de Motilla lo resume todo en “¡No a los despidos masivos! ¡No al ERE en Mahle!”.