Siguen las conversaciones entre Junta y Ayuntamiento de Toledo para acabar con el abandono de la estación de autobuses
Unas instalaciones en las que la accesibilidad brilla por su ausencia, con unas escaleras inoperativas desde hace años y un ascensor que funciona día sí y día no
El programa 'Hoy por Hoy Toledo' de la SER se desplaza hasta la estación de autobuses / Alejandro Martín Carrillo
Toledo (Toledo)
Continúan las conversaciones entre la Junta de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Toledo para acabar con el estado de abandono que sufre la estación de autobuses de la capital.
Estación con escaleras mecánicas que llevan años sin funcionar, además de que el ascensor apenas tiene capacidad para cuatro personas "por riesgo de quedarse atascados", según se lee en el cartel colocado en sus puertas. La Junta es la propietaria de la estación y el Ayuntamiento de Toledo se encarga de su mantenimiento. Así está recogido en un convenio firmado en el año 1986 y que tiene una vigencia de 75 años.
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A todo ello, se suma que, de los locales comerciales disponibles, más de la mitad se encuentran sin actividad. Una circunstancia motivada porque la zona no es atractiva para los diferentes empresarios. De hecho, apenas quedan dos tiendas de chucherías y bebidas frías. Unos negocios cuyo principal cliente, según sus propios gerentes, es "mayoritariamente turistas".
El consejero de Fomento de Castilla-La Mancha, Nacho Hernando, se muestra optimista de cara a llegar a un acuerdo entre las dos administraciones. Un optimismo que ha mostrado a preguntas de los periodistas en la presentación ante los agentes sociales del Eje 4 del nuevo Pacto Castilla-La Mancha Horizonte 2030, durante este lunes.
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Una estación de autobuses que supone la puerta de entrada a una Ciudad Patrimonio de la Humanidad y por la que pasan más de tres millones de pasajeros cada año.
