CCOO tacha de “ofensiva” la última propuesta de Mahle y mantiene la huelga en Motilla

Durante la jornada de huelga de este jueves, Hortelano ha denunciado que la oferta de la compañía no responde a las expectativas de los trabajadores y pone en riesgo la estabilidad de la plantilla. De esta forma, el dirigente sindical ha asegurado que “entendemos que es una propuesta ofensiva, máxime cuando, precisamente en la jornada de huelga, la dirección de Mahle saca un comunicado diciendo que las negociaciones están siendo positivas y colaborativas. No creemos que sea una propuesta justa ni socialmente aceptable, y más cuando se pretende desafectar a 33 personas de las 550 de la planta”.

La propuesta de la empresa incluye indemnizaciones que varían entre 26 y 27 días por año trabajado, en función de la antigüedad, con un límite máximo de 17 mensualidades. Según Hortelano, estas condiciones resultan especialmente graves considerando que la compañía ha recibido ayudas públicas en los últimos años.

Hortelano ha añadido que “son propuestas ofensivas para una empresa que ha tenido ayudas con fondos públicos, ofensivas para un pueblo y para una comarca que se está jugando su futuro y su proyecto de vida”. Además, el dirigente sindical ha recordado que la plantilla de Motilla lleva semanas reclamando una solución que garantice los derechos de los trabajadores.

Continuidad de las negociaciones

Las reuniones entre la empresa y la representación de los trabajadores continúan este viernes en Albacete, a partir de las 11 de la mañana. Hortelano ha advertido que, dada la duración de la sesión anterior, que se ha extendido desde las 10:30 hasta casi las 22:00 horas, es probable que esta nueva reunión también se prolongue durante varias horas.

Mientras tanto, CCOO mantiene la huelga convocada para el lunes 27 y el martes 28 de octubre, como medida de presión frente a lo que consideran una negociación insuficiente y poco respetuosa con la plantilla.

Impacto en la comarca

El conflicto laboral en la planta de Motilla ha generado preocupación en la comarca, donde cientos de familias dependen directamente del empleo en la compañía. La incertidumbre sobre el futuro laboral de los trabajadores y la falta de avances en las negociaciones han encendido las alarmas sobre el impacto económico y social que podría tener un acuerdo considerado insuficiente por el sindicato.

CCOO insiste en la necesidad de una solución que sea “justa y socialmente aceptable”, en línea con las declaraciones previas de la propia empresa sobre la intención de alcanzar acuerdos positivos. Sin embargo, hasta el momento, los trabajadores y el sindicato no consideran que la oferta presentada cumpla con esos criterios.