La sociología universitaria
En un contexto donde todo se mide en empleabilidad o rendimiento, necesitamos recordar que las ciencias sociales son el fundamento de una ciudadanía crítica

La mirada de Toledo: La sociología universitaria (10/11/2025)
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Toledo (Toledo)
A veces olvidamos que la universidad no solo forma profesionales, sino que además forma conciencia social. Y en ese propósito, la sociología tiene un papel insustituible.
El pasado jueves y viernes, la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Toledo de la Universidad de Castilla-La Mancha ha acogido las Jornadas conjuntas del Consejo académico de la Federación Española de Sociología y de la Conferencia de responsables académicos de Sociología.
Puede parecer una cita más en la agenda académica, pero en realidad es mucho más que eso, es una oportunidad para repensar qué lugar ocupa hoy la sociología en la universidad.
La sociología no es una disciplina cualquiera, es una forma de mirar el mundo, de preguntarse por las causas de lo que damos por sentado. Nos ayuda a entender cómo las biografías individuales se entrelazan con los grandes procesos sociales como la desigualdad, la precariedad, el poder, la cultura, la tecnología o el cambio climático, por ejemplo.
Y esa mirada crítica, en una época de prisas, algoritmos y discursos simples, se ha vuelto urgente. Cuando hablamos de fortalecer la sociología universitaria, hablamos de tres aspectos esenciales. Primero, reconocer su valor público. En un contexto donde todo se mide en empleabilidad o rendimiento, necesitamos recordar que las ciencias sociales son el fundamento de una ciudadanía crítica. Formar en sociología es formar pensamiento libre, capaz de cuestionar y de construir alternativas. Segundo, repensar cómo enseñamos.
El alumnado de hoy es diverso, digital y exigente, la sociología solo puede llegar a ellos si se conecta con su realidad, si convierte sus problemas cotidianos como la vivienda, el consumo, las redes sociales o el empleo, en objetos de análisis y debate. Enseñar sociología se convierte así en enseñar a leer el mundo. Y tercero, cooperar. Frente a la lógica de la competencia, la sociología apuesta por la colaboración entre universidades, por el intercambio de experiencias docentes y por la creación de redes que nos permitan avanzar juntos.
Por eso encuentros como este son importantes, porque refuerzan una comunidad académica comprometida con el pensamiento crítico y con el bien común, porque ofrece una brújula colectiva.
Desde Toledo, ciudad de diálogo y mestizaje, este encuentro nos ha recordado que comprender la sociedad sigue siendo el primer paso para transformarla.

Natalia Simón
Directora del departamento de Filosofía, Antropología, Sociología y Estética de la UCLM




